La mañana de este domingo, tras ser consultado por la detención de diez gendarmes presuntamente involucrados en un red de tráfico de armas dirigida desde la cárcel, el ministro (s) de Justicia, Jaime Gajardo, aseguró que “aquellos que cometen ilícitos no van a quedar en impunidad”.
Aunque fue tajante en castigar severamente a los funcionarios que puedan estar asociados con la venta de armas, precisó que “la mayoría de los gendarmes realizan una labor encomiable, que es realmente muy relevante para nuestro sistema”.
En esa línea, el ministro (s) agregó que “también necesitamos cuidar la institución de aquellas personas que se apartan de sus deberes funcionarios, las que están eventualmente cometiendo ilícitos, de aquellas personas que están permitiendo que las bandas criminales sigan operando”.
Para identificar estos casos detalló que desde marzo del año pasado constituyeron un equipo de tareas en conjunto con la Subsecretaría del Interior, Fiscalía Nacional, policías y Gendarmería. “Precisamente porque hemos detectado que hay que atacar el crimen organizado al interior de los establecimientos penitenciarios”, indicó en diálogo con Mega.
Gajardo recalcó que “nosotros estamos apoyando todo este tipo de actividades de una manera muy fuerte. Esperamos que esta investigación llegue a puerto y que podamos dar una señal muy contundente de que este tipo de situaciones no las vamos a permitir al interior de esta institución que es tan importante para Chile”.
Diez gendarmes detenidos
La Fiscalía Metropolitana Occidente encabezó un operativo interregional que terminó con la detención de nueve gendarmes activos detenidos y uno en retiro por su presunta participación en una red de tráfico de armas que era liderada desde una cárcel en Coquimbo.
La investigación fue realizada por el Departamento de Investigación Criminal (Dicrim) de Gendarmería, en conjunto con las unidades especializadas de Carabineros OS9 y GOPE.