Esta mañana, Rubén Verdugo, Superintendente Subrogante del Medio Ambiente se refirió a la emergencia medio ambiental declarada por la Intendencia de Valparaíso producto de un peak de dióxido de azufre en Quintero, registrado entre las 8 y 9 horas.
Al respecto, la autoridad señaló que tras la emergencia, los fiscalizadores se dirigieron inmediatamente a las dos posibles fuentes generadoras de SO2 de la zona, en este caso la fundición Ventanas de Codelco, y el complejo termoeléctrico de AES Gener. "En ambos espacios se levantó información, tenemos una mirada de lo que pudo haber ocurrido y qué significa en términos prácticos", expresó el Superintendente a Radio La Clave.
Sobre esto, indicó, que probablemente "vamos a tener que solicitar de alguna manera a uno de los proyectos allí presentes - fundamentalmente a la fundición Ventanas - que realicen ajustes a sus planes operacionales" indico. "Lo que quedó en evidencia ayer es que si bien es cierto que en ambos proyectos se están cumpliendo sus planes operacionales, no son suficientes para abordar aquellas condiciones que son más complejas meteorológicamente hablando".
De acuerdo a la autoridad, en el período previo a la condición de peak se produce una condición de inversión térmica importante, y además en este caso, ocurrió una condición "que hace mucho rato no se daba", y es que el viento llegó a condición cero, por tanto "las capacidades de dispersión de este gas en la zona se vieron completamente disminuidas".
El viento, explica, es un mecanismo de dispersión de este gas que toman como factor al momento de entrar en funcionamiento.
De acuerdo a la autoridad, cada empresa tiene un equipo de meteorólogos que el día anterior ya tienen un reporte de las condiciones que se tendrán.
"No me atrevo a categorizar efectivamente e ir al segundo concepto de negligencia (...) Ellos pensaron que iban a mejorar las condiciones (de viento)", agrega.
Derrame de petróleo
Sobre el derrame de aproximadamente 40.000 litros de petróleo diésel en el terminal de Isla Guarello a 250 km al Noroeste de Puerto Natales, la autoridad indicó que las experiencias que han existido tanto a nivel nacional como internacional permiten contar con tecnologías que generarán un espacio de recuperación que pueden ser invertidos.
Sin embargo, señala, "van a quedar trazas de hidrocarburos probablemente por mucho tiempo, dando vuelta en distintos espacios en la zona".
"Esto es una cuestión que va asociado a cualquier mecanismo de recuperación. Los mecanismos de recuperación en general están al orden de mejores condiciones de 60-70%, extremando las capacidades uno pudiese llegar al 80% (...) pero siempre va a quedar un remanente que va aquedar dando vuelta en el medioambiente, y es en esa cantidad que uno puede ver el daño real de lo que va a quedar allí".