Juan de la Cruz Suárez será el sacerdote que oficiará la misa más importante de la Iglesia Católica en Chile, el próximo 18 de septiembre. Y lo hará en medio de la profunda crisis que atraviesa la institución y que, de manera inédita, llevó al cardenal y arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, a nombrarlo en su reemplazo tras restarse de la actividad.

Juan Suárez tiene 76 años y fue ordenado sacerdote hace 50, en 1968, por el cardenal Raúl Silva Henríquez. Su formación inicial la recibió de los Padres Mercedarios y estudió Filosofía y Teología en la Universidad Católica.

Entre los años 1967 y 1970, el presbítero estrechó lazos de amistad con actores y actrices, junto con figuras de la radio y la televisión. Esta cercanía lo llevaría a ser nombrado como el "capellán de los artistas". Tal fue la cercanía que, incluso, tomó clases de actuación en las que aprendió, entre otras técnicas, a impostar la voz, desarrollar su desplante en el escenario, movimientos y vocalización.

Quienes lo conocen aseguran que esto le sirvió para predicar y comunicarse mejor con los fieles. Su gusto por lo artístico lo llevó a formar en 1970 la Corporación del Teatro Sagrado, agrupación que por 35 años dramatizó la obra La Pasión del Señor, la cual recrea los textos bíblicos. También trabajó en las radios Portales, Chilena, Misionera y en Radio María. Además, estuvo cerca de 20 años a cargo de las misas de Canal 13, y ofició los funerales de artistas como el folclorista Alberto Rey, Luisín Landáez, Chicho Azúa y Nicanor Parra. Actualmente es el deán de la Catedral de Santiago.

Tedeum

El tedeum es la instancia en que la jerarquía católica se dirige a las máximas autoridades del país, y que este año encabezará el Presidente Sebastián Piñera. Allí, el sacerdote que oficia la ceremonia -y que históricamente ha sido el arzobispo de Santiago- entrega un mensaje político respecto de los temas de la contingencia nacional, como el aborto y la crisis de la Iglesia.

Fuentes de la Iglesia consideran que la designación de Suárez responde a una decisión "lógica" y que se ajusta al protocolo eclesiástico, ya que es el "dueño de casa" de la Catedral y quien ha recibido a los presidentes en años anteriores. La situación, sin embargo, ha generado dudas en otros sectores del clero sobre las precauciones que estaría tomando Ezzati con esta acción. Esto, debido a que el cardenal podría haber elegido a un obispo auxiliar de Santiago, como Cristián Roncagliolo o algunos de los que "están prestados" en otras diócesis.

Una explicación de la ausencia de Roncagliolo sería su estado de salud, debido a sus tratamientos para el cáncer. También, según las mismas fuentes, se habría sondeado a otros obispos auxiliares, quienes no habrían querido asumir esta "doble función", debido a la complejidad del discurso que se da en el tedeum. La decisión de Suárez, sin embargo, genera consenso entre distintos grupos de religiosos, quienes lo ven como un sacerdote "neutro", al no estar cuestionado. En 2012, Suárez dio una entrevista a la Conferencia Episcopal en que se refirió al significado del tedeum: "Al salir del tedeum parece que dimos un gran respiro que permite continuar. Eso se nota en las palabras de los políticos tras la celebración. El tedeum sigue y seguirá siendo parte del alma de Chile".