En la comuna de Lebu, en la Región del Biobío, la ministra del Interior, Carolina Tohá, junto a su par de Defensa, Maya Fernández, participaron del velatorio del suboficial mayor Carlos Cisternas, quien falleció el pasado sábado 27 de abril, junto a otros dos funcionarios tras una emboscada en la comuna de Cañete.

Al salir de la ceremonia religiosa, la secretaria de Estado conversó con la prensa y además de lamentar lo ocurrido, aseguró que desde el gobierno apoyarán a las familias de los mártires y se “empeñarán” en aclarar el crimen y dar con los responsables.

Nos vamos a empeñar, como hemos estado en estas horas, por aclarar este crimen, por dar con los culpables y por desplegar en todo este sector un refuerzo a todo lo que se ha hecho en materia de seguridad para impedir que este ataque traiga de vuelta el enorme temor que ha acompañado la vida de los carabineros y de los suboficiales. Y que se ha hecho en toda esta parte de nuestro país durante tanto tiempo y que el último tiempo ya iba retrocediendo”, señaló.

Respecto a los avances de la investigación, la titular de Interior instó a dejar que el Ministerio Público avance en esa materia, afirmando que desde el Ejecutivo apoyarán las gestiones.

Se está trabajando muy arduamente, hay varias líneas investigativas, pero todavía no hemos dado el resultado que queremos dar, que es detener a los culpables”, precisó.

En esa línea, sostuvo que cada día “se van descartando hipótesis, se van levantando antecedentes, pero no nos sirve decir ‘estamos más cerca’ hasta que no los tengamos (a los culpables) y todavía no los tenemos”.

Respecto a la seguridad en el sector donde ocurrieron los hechos, la ministra aseguró que “se ha trabajado mano a mano y se han logrado muchos avances en esta zona y ciertamente lo que pasó requiere un reforzamiento, va a requerir ajustar muchos protocolos, ya se ha trabajado en eso en estos días porque no solo tenemos que darle seguridad a la comunidad, sino también a las fuerzas de orden que están a cargo de cuidar la vida”.