Hasta Quilpué, en la Región de Valparaíso, llegó la ministra del Interior, Carolina Tohá, para reunirse con familias que fueron afectadas por los megaincendios en la zona. En el lugar, la secretaria de Estado respondió algunas consultas de la prensa en torno a la investigación por el exmilitar venezolano Ronald Ojeda, quien durante la madrugada del miércoles fue secuestrado desde su departamento en Independencia por cuatro sujetos desconocidos.
Tal como señaló el miércoles el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, son varias las hipótesis que se manejan en torno al caso. Eso sí, Tohá apuntó que la discusión, sobre todo “en los medios de comunicación”, se ha concentrado solo en una de ellas: que el secuestro fue realizado por agentes de Nicolás Maduro debido al rol opositor que tiene el exmilitar venezolano. “Las hipótesis no son dos ni tres, son varias más. En todas ellas se están haciendo diligencias”.
Otras de las hipótesis que maneja el Ministerio Público es que pudo haber sido un secuestro realizado por el crimen organizado. La tercera idea, que menos fuerza cobra, es el autosecuestro. “Sería muy poco serio de nuestra parte descartar de antemano alguna. Pero no tenemos tampoco de antemano ningún juicio armado de que una es la verdadera y otra no”.
“Esperamos que de ese esfuerzo tan amplio, desplegando recursos en todas las líneas investigativas, vayamos teniendo resultados, vayamos acercándonos a la verdad, especialmente para salvar la vida de la persona secuestra y dar con los culpables para que tengan la sanción que corresponde”, remató. “El gobierno está estudiando y apoyando la investigación que hace la fiscalía, que contempla distintas hipótesis”, complementó.
“Gran parte del esfuerzo que se hace en la investigación, en la búsqueda en las medidas de seguridad que se toman después de un delito de esta naturaleza no se conocen, no se pueden dar a conocer, pero son muy intensas y muy amplias”, aseguró. En ese sentido, detalló que algunas de esas labores “tienen que ver con medidas de resguardo para distintas personas, tienen que ver con la frontera, tienen que ver con la investigación, tienen que ver con gestiones internacionales”.
Las indagatorias están siendo encabezadas por el fiscal Héctor Barros. Dentro de las indagatorias se contempla que los sujetos, que se disfrazaron como policías chilenos, utilizaron al menos tres autos. Uno de esos autos fue ubicado en Renca. Al interior del vehículo, un Nissan Versa con patente clonada, se ubicaron chalecos que simulaban ser de la Policía de Investigaciones, cascos y un cargador de 9 milímetros.