El ministro de la Corte Suprema Carlos Aránguiz fue designado para revisar la solicitud de detención con fines de extradición emitida por Estados Unidos en contra del empresario Carlos Remigio Cardoen Cornejo (76), quien fue acusado en ese país por la exportación ilegal del estratégico metal circonio a Irak. Este material fue usado para la elaboración de bombas de racimo.

Pese a que no existe un plazo para resolver sobre la detención, Aránguiz deberá determinar si la petición estadounidense es acorde con la legislación vigente. No obstante, al tratarse de hechos previos a la Reforma Procesal Penal y al tratado de extradición que firmaron Chile y EE.UU. en 2017, los antecedentes que presente el país requirente deberán responder a las condiciones que dictan el antiguo Código de Procedimiento Penal y el acuerdo bilateral de 1900.

El 6 de agosto de 1902, el gobierno del entonces Presidente Germán Riesco promulgó el citado acuerdo de extradición entre Chile y Estados Unidos. Según la norma, la entrega mutua de personas se concretará por los siguientes delitos: homicidio, incendio, robo, falsificación, malversación, fraude, perjurio, violación, destrucción de ferrocarriles, delitos cometidos en el mar y crímenes relacionados con trata de esclavos.

Según Claudio Troncoso, jefe del Departamento de Derecho Internacional de la Universidad de Chile, es necesario conocer el delito por el que se solicita la detención y compararlo con los señalados en el tratado. Además, se deberá ratificar que el ilícito sea sancionado por ambos países.

Junto a ello, agrega el académico, se tiene que verificar si los antecedentes que aporta EE.UU. demuestran participación fundada de Cardoen en calidad de autor, cómplice o encubridor.

Otro punto que destaca en el pacto dice relación con los casos de extradición de ciudadanos de cada país. En este sentido, el acuerdo fija que "ninguna de las partes contratantes estará obligada a entregar a sus propios ciudadanos en virtud de las estipulaciones de este tratado".

"Podré defenderme"

Cercanos a Cardoen indicaron que el empresario permanecería hasta este jueves en su casa en la comuna de Vichuquén, en la Región del Maule. En horas de la tarde, luego de trasladarse a Santiago, se reunirá con el abogado Juan Pablo Hermosilla, quien lo representará en este caso. Durante la cita se comenzaría a definir la estrategia de la defensa ante la arremetida norteamericana.

El propio empresario expresó que está dispuesto a afrontar el proceso. "Llegó el momento de dar la pelea", adelantó Cardoen a La Tercera. "Una vez que me citen a audiencia, podré defenderme y contar mi versión sobre estos hechos que han querido levantar en mi contra. No quiero desarticular ninguna posible estrategia de mi defensa", añadió.

En cuanto a la contraparte, Estados Unidos contrató al penalista Alfredo Etcheberry para que lidere la solicitud. Consultada al respecto, la embajada estadounidense en Chile señaló que "no se comentan las solicitudes de extradición".