Pasadas las 12.30 de este lunes, comenzó a revisarse en el Tribunal Constitucional (TC) el requerimiento ingresado por el Presidente Sebastián Piñera que busca declarar inconstitucional la reforma para el segundo retiro del 10% de los fondos previsionales, iniciativa presentada por un grupo de parlamentarios.
Esto, luego de que la semana pasada -tras un empate y haciendo uso del voto dirimente de la presidenta del organismo, María Luisa Brahm- el tribunal decidiera acoger a trámite el libelo.
Cabe recordar que a inicios de diciembre, el organismo había dejado en suspenso dicha resolución. Esto, a la espera de los documentos que solicitó al Legislativo sobre votaciones, estado actual de la tramitación y el texto del proyecto presentado por los parlamentarios, que finalmente fue rechazado en el Congreso. Mientras, en paralelo, el proyecto de ley del Ejecutivo que también buscaba permitir el retiro de estos fondos fue aprobado y promulgado. De hecho, este lunes -y ante las entonces seis millones de solicitudes para girar estos dineros- algunas AFP se adelantaron y comenzaron el pago.
Así, hoy se dio inicio a las audiencias públicas para revisar el fondo del requerimiento, donde los expositores tendrán un máximo de 10 minutos para desarrollar sus planteamientos. En esta instancia no habrán preguntas por parte de los ministros del TC y tampoco se exige que estén presentes.
A las 9.00 horas de este viernes, en tanto, comenzarán los alegatos. Día en el que también se podría tener la resolución del tribunal. Y pese a que la iniciativa parlamentaria no prosperó, se está a la espera del pronunciamiento del organismo sobre si los legisladores pueden o no presentar reformas como ésta a través de artículos transitorios.
La discusión cobra relevancia, además, luego de que ayer la diputada Pamela Jiles (PH) ingresara un proyecto de reforma constitucional para un tercer retiro de los fondos previsionales. Anuncio que recibió críticas tanto oficialistas como de oposición. Mientras que desde el Ejecutivo, el vocero Jaime Bellolio calificó la iniciativa como una “maniobra electoral” y añadió: “Seguir en la línea de hacer populismo a costa de los ahorros de las personas es una cuestión que, por supuesto, le hace muy mal al país”.