Universalización de atención primaria: 34 mil personas se han inscrito desde que comenzó el piloto

En el mundo sanitario, entre expertos y políticos -incluso puertas adentro- no son pocos los que aseguran que las señales del Ejecutivo respecto de una reforma de salud han sido “nulas”. Sin embargo, las autoridades sanitarias han repetido en más de una ocasión que la reforma ya partió y que su “corazón” es la universalización primaria, estrategia que el pasado cuatro de abril se inició en siete comunas del país: Canela (Coquimbo), La Cruz (Valparaíso), Renca y Alhué (Metropolitana), Coltauco (O’Higgins), Linares (Maule) y Perquenco (La Araucanía). A ellas se les denominó piloto y con el correr del tiempo -y el avance de las críticas-, pioneras.

¿En qué consiste esta estrategia? Como en la actualidad sólo pueden atenderse en los centros de Atención Primaria de Salud (APS) aquellas personas que son beneficiarias de Fonasa y que están inscritas en los centros de salud, el proyecto apunta a extender la atención a toda la población, independiente de su previsión de salud, abarcando a quienes están en isapres. Asimismo, busca fortalecer a la APS para cuidar a la población según sus necesidades de forma oportuna y de calidad. Así entonces, una vez que cada comuna sea parte del plan progresivo de implementación, dispondrá de financiamiento para ampliar la cobertura a la población no beneficiaria de Fonasa del territorio. Ahí es donde ya hay siete comunas piloto y de las cuales hoy se tienen las primeras cifras a modo de balance.

De acuerdo a los datos del coordinador de la reforma y encargado de poner en marcha este proyecto, Bernardo Martorell, a siete meses desde que se implementó se han inscrito 34.454 personas, de las cuales 28.747 son de Fonasa, 5.402 de isapres y 305 carabineros e integrantes de las Fuerzas Armadas y la PDI, con un promedio de 4.922 nuevos inscritos por comuna.

En ese contexto, Martorell aseguró durante la Comisión de Salud del Senado del pasado 17 de octubre que esos 34 mil inscritos corresponden al 70% de la meta establecida para este año. “Hasta la fecha se está cumpliendo con los tiempos y coberturas que se esperaban”, indicó. Según esos mismos cálculos, aún faltan cerca de 15 mil nuevos inscritos para llegar a los casi 50 mil que el Ministerio de Salud se puso como meta.

Para atraer más gente, Martorell explicó que se modificaron los horarios de atención, pues muchas personas no podían asistir debido a que los centros funcionaban en tiempos muy acotados. “Habilitar los servicios en horarios extendidos era importante, porque de esta forma se facilita el acceso y esto está 100% en todas las comunas pioneras, porque las siete ya disponen más de 30 horas a las semanas. Por ejemplo, en Renca el horario va de siete de la mañana a las ocho de la tarde”, apuntó en la mentada comisión.

El reporte de estos avances no dejaron del todo tranquilos a los parlamentarios, quienes incluso -y de manera transversal- expresaron sus reparos durante la discusión presupuestaria de Salud, cuando se anunció que de las siete comunas piloto se pretende pasar a 20 durante 2024, pues advirtieron que los resultados de los primeros municipios no están claros como para seguir avanzando.

“Nadie ha dicho cuál ha sido el alcance de las primeras comunas pilotos, su evaluación o contenidos y cuál es el horizonte de tiempo o de evaluación para avanzar al resto del país”, señaló la senadora Luz Ebensperger (UDI) al respecto.

Este mismo planteamiento lo compartió Sergio Gahona (UDI): “El presupuesto de salud crece un 8,1% y mis preguntas tienen que ver con la eficiencia del uso de los recursos. Una de mis preocupaciones es que no conocemos la evaluación de las comunas piloto y se aumentan 13 comunas nuevas para llegar a 20, pero no sabemos si esto está resultando, cuáles son los efectos y el gasto por beneficiario”.

En ese sentido, Luis Castillo, decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de la U. Autónoma, afirma que el proyecto piloto “todavía tiene muy poca población asignada para sacar conclusiones y generar un procedimiento que permita extender esta estrategia a todo el país”.

Por su parte, Héctor Sánchez, director del Instituto de Salud Pública de la U. Andrés Bello, indica que desde el punto de vista de la salud esta es una buena iniciativa, pues hace de puerta de entrada a la red y pesquisa problemas de salud con tiempo. Sin embargo, advierte que el sistema chileno no tiene las características necesarias para llevarla a cabo.

“Es una estrategia un poco forzada para lo que es el sistema chileno, un sistema público sobrepasado y mal evaluado por sus usuarios por la mala oportunidad en la atención, por lo tanto, la cantidad de usuarios de las isapres inscritos, probablemente está más relacionado con prestaciones no otorgadas en el sistema privado, como vacunas o entrega de alimentos”.

Luis Castillo también agrega que es difícil analizar bien la implementación de las estrategias, porque en las comunas elegidas hay muy pocos afiliados del sistema privado: “Todas las comunas actualmente en el plan piloto son comunas pequeñas, donde la participación privada es mínima. Además, el volumen es muy poco para tomar algunas decisiones o para saber información más detallada. Sólo cuando se incorporen comunas grandes vamos a poder sacar conclusiones reales de la universalización y sus fortalezas”.

Para dar inicio a la inscripción de personas no Fonasa en los centros de atención primaria, las autoridades sanitarias realizaron una ceremonia en el Cesfam Bicentenario de Renca, una de las siete comunas del plan piloto. Esta comuna de la capital es la única del piloto que supera los 100 mil beneficiarios de Fonasa: según los mismos datos de la institución hay 133.237 inscritos, mientras que, de acuerdo a los antecedentes de la Superintendencia de Salud, hay 10.181 habitantes afiliados a una isapre. ¿Otros ejemplos? En La Cruz 19.423 personas están en Fonasa, mientras que 2.485 en una aseguradora privada. Donde es más notorio es en Perquenco, pues sólo 128 personas tienen seguros en el sector privado y 6.266 están en el público (ver tabla).