Luego de más de 100 días en toma –incluyendo una huelga de hambre de 72 horas- el movimiento feminista de la Universidad de Playa Ancha (UPLA) de Valparaíso, bajó las manifestaciones tras llegar a un acuerdo con el plantel. "He sentido tristeza. Había que terminar con eso y no podemos poner en riesgo la integridad física de nadie", dijo el rector Patricio Sanhueza.
El compromiso adquirido entre las partes estableció –dentro de otras materias- perfeccionar y terminar el "Protocolo contra el acoso y violencia de género". "La idea es tener un conjunto de acciones que nos permitan instalar una igualdad de género profunda", dijo Sanhueza.
El académico sostuvo que se ha acordado incorporar bibliografía con perspectiva de género a los planes formativos "en la medida que sea posible. Las comisiones curriculares establecerán mecanismos que evalúen y recomienden contenidos a cada una de las carreras", lo cual podría comenzar a concretarse a partir del año 2021. "La Universidad irá madurado este tema, no somos expertos, pero hay que ir entendiéndolo", acotó.
En ese sentido, Sanhueza precisó que los fiscales universitarios, encargados de realizar las investigaciones por los casos de presunto acoso o abuso, fueron aumentados de 1 a 3, ya que "puede haber acumulación de procesos".
En cuanto a las clases perdidas, el rector indicó que "se deberán recuperar todas", pues "no podemos perder la calidad y no queremos que nadie sienta que esto fue una pérdida", por lo que se estima que el año académico 2018 no terminará antes de enero. Tampoco se descarta llegar a marzo.
Respecto a los daños generados en las sedes universitarias, serán evaluados hoy, sin embargo se tiene conocimiento previo del rebalse de una piscina que podría haber generado deterioros en un piso. "Vamos a abrir sumarios y acciones judiciales si es que hay daños materiales o a personas", finalizó Sanhueza.