Alrededor de 150 integrantes de equipos de rescate permanecen en el sitio donde se produjo un mortal derrumbe en Valparaíso, el martes, en medio de riesgosas labores de rastreo entre las ruinas que debieron ser interrumpidas por algunas horas por nuevos desplomes. Al mismo tiempo, la tragedia volvió a evidenciar la precaria situación de numerosos inmuebles del Puerto, que presentarían riesgos similares.
La atención de los rescatistas seguía centrada en el sector de calles Huito y Aldunate. Allí fallecieron María Rodríguez (82) y Mónica Bruna (53), madre e hija, quienes arrendaban la propiedad. Otras cuatro personas que transitaban a la altura de la escalera Pasteur también murieron.
Una niña de siete años y su hermano de seis pudieron ser rescatados: ambos están fuera de riesgo vital.
Tras el hecho, se reavivó la preocupación local por el deterioro que muestran numerosas propiedades en la comuna. Según la Municipalidad de Valparaíso, entre 1997 y 2019 la alcaldía ha decretado 749 órdenes de demolición total o parcial de viviendas. No obstante, el inmueble siniestrado el martes no figuraba entre los programados para demoler.
El alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, recalcó que el municipio continuará "con nuestro plan de demolición, que tiene programadas seis edificaciones que son las más urgentes", planteó.
Durante la actual administración se han invertido $ 450 millones en esas labores. Sharp insistió en que no se debe responsabilizar a los propietarios de lo que ocurre con las viviendas: "Muchos no cuentan con los recursos para arreglar sus casas: no es algo que se pueda hacer de un día para otro".
En el Congreso, el ministro de Vivienda, Cristián Monckeberg, confirmó que esa cartera buscará una fórmula "para apoyar a los municipios, primero para detectar las zonas de riesgo y que las puedan incorporar en sus planos reguladores, y también con recursos que permitan poder demoler viviendas que tienen órdenes de demolición y que, por falta de recursos, ello no se ha hecho". Si bien el titular de Vivienda no detalló montos, aseguró que habrá una coordinación con la municipalidad en este tema. Extraoficialmente, se señaló que el ministerio podría disponer el traspaso de alrededor de $ 800 millones.
Sharp explicó que conversó con el secretario de Estado, a quien señaló "la necesidad de poder contar con fondos adicionales". "El ministro anunció (...) de acceder a nuestra solicitud para contar con recursos. Esa es una buena noticia, naturalmente, dentro de esta tragedia, porque vamos a poder seguir avanzando, sin tener el problema de los recursos, en todos los trabajos que quedan pendientes", dijo el edil.
El municipio tenía previsto para este segundo semestre la demolición de cuatro edificaciones. Dos se ubican en calle Ferrari, otra en Clave, cerca de la Aduana, y la restante en calle Carmen, en el cerro Placeres. Felipe Arteaga, director ejecutivo de la Fundación Vivienda, sostuvo que 137.746 inmuebles de la capital de la Región de Valparaíso muestran "déficit cualitativo", lo que corresponde al 10,6% del total nacional. "Se trata de viviendas con materialidad deficitaria, baja superficie y problemas de acceso a servicios básicos", precisó.
Investigación
Este miércoles, el fiscal jefe de Valparaíso, Cristián Andrade, fue designado para indagar las causas del desplome. Uno de los antecedentes que eran analizados este miércoles se centraba en la materialidad del inmueble: el encargado de emergencia de la municipalidad, Ezio Passadore, afirmó que "todo apunta a una filtración por agua". De acuerdo con esta hipótesis, el escurrimiento habría corroído la estructura de la vivienda y favorecido su derrumbe.
Según Claudio Reyes, concejal de Valparaíso y arquitecto, las construcciones de este tipo "son antiquísimas. No tienen ningún tipo de reparaciones o mantenimiento".
Alejandra Tapia, nieta de una de las fallecidas, advirtió que antes de la tragedia desde el cerro "caía agua, que se filtraba por las paredes. Era un tema de años. Se hacían reparaciones, pero nada concreto. La solución era deshacer la casa y construirla de nuevo".
El Sernageomin emitió un informe sobre las condiciones del terreno donde se ubicaba la vivienda destruida. Alejandro Cecioni, subdirector del organismo, indicó que el derrumbe se debería a "una condición de inestabilidad en la construcción. El terreno donde se ubicaba el inmueble era competente y no hubo una remoción de masa o deslizamiento".
La noche de este miércoles, la tarea de los rescatistas continúa. "Ya llegamos, con sondas, a un par de sectores, donde presumíamos había víctimas, que ya están detectadas", dijo el comandante del Cuerpo de Bomberos de Valparaíso. "Tenemos cuatro (víctimas) detectadas, pero hay seis (denuncias) por presuntas desgracias", explicó.
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