“Van a empezar a correr balas y esto se pondrá más peligroso”: el atardecer más rojo de Contulmo
Por más de 30 minutos la familia Grollmus estuvo bajo ataque en su propiedad, ubicada en la Región del Biobío. El molino y el museo ubicados en el predio fueron completamente consumidos por un incendio intencional y, además, un adulto mayor de 79 años fue herido a bala en una de sus piernas. El caso que conmocionó a autoridades locales y nacionales, durante la tarde de este martes fue adjudicado por el grupo Resistencia Mapuche Lafkenche.
Fue la primera víctima de una frenética y violenta tarde en la comuna de Contulmo, en la Región del Biobío, pero Fabiola (51), cuando eran las 18 horas del lunes, aún no lo sabía. Iba en su camioneta de regreso a su casa en compañía de su hija Camila cuando al llegar al kilómetro 3 de la Ruta P-700 fue interceptada por un grupo de 20 personas, todos a rostro cubierto y portando escopetas y fusiles.
“Iban vestidos con ropa mimetizada tipo militar”, advirtió la mujer a Carabineros en su denuncia, quien detalló que luego de quedar paralizada por el miedo, uno de los asaltantes le señaló: “Bájese del auto, dése la vuelta, porque van a empezar a correr balas y esto se pondrá más peligroso”.
Las mujeres corrieron y se escondieron en las orillas de un río y luego no supieron más, hasta enterarse ya en la comisaría que era el inicio de una tarde que terminó en una verdadera tragedia: dos ancianos gravemente heridos a bala.
Cinco minutos después del robo, a las 18.05, entró el llamado a la Tenencia Contulmo. La Ruta P-700, a la altura del kilómetro 1.220, estaba cortada con árboles caídos a todo lo ancho de la calzada, sin embargo, cuando los policías llegaron al lugar vieron que el escenario era aún peor: se veía desde ahí una larga línea de humo que provenía de uno de los campos cercanos a la carretera y se escuchaban ráfagas de disparos.
Ya no eran árboles caídos, unas mujeres asaltadas y una inspección de rutina. El sol comenzaba a esconderse y así también el cariz del operativo tomaba otros tintes. Por lo mismo, se pidieron refuerzos, y los policías enfilaron hasta el lugar desde donde se veía el humo y se escuchaban los disparos, hasta toparse con un incendio de gran magnitud que afectaba al Molino Grollmus -construido en 1915- y el Ecomuseo Molino Grollmus.
El molino comenzó a operar en 1916 y hasta ayer seguía funcionando como tal, produciendo harina que podía ser utilizada por comunidades cercanas. Para realizar dicha función, se utilizaba energía hidráulica y operaba a través de un sistema de poleas que molían y separaban el trigo. Además, lo utilizaban para moler manzanas y un aserradero.
En sus orígenes, además, funcionó como el primer generador de electricidad para el pueblo de Contulmo. A raíz de esto, actualmente a un costado de este funcionaba el ecomuseo que relataba su historia.
La escena, según recordaron los testigos que llegaron al lugar, era catastrófica: el molino y el museo estaban consumidos por las llamas, lo mismo dos camionetas y una pequeña casa que estaba en el terreno. La casa patronal, de propiedad de la familia Grollmus, estaba intacta.
El terror puertas adentro y el anuncio del gobierno
El incendio había sido feroz, concluyeron los bomberos, dado que el fuego arrasó con el molino y el museo en su totalidad, pero la violencia del ataque no se traducía solo en daños materiales.
Fue a las 18.20 que Carlos Grollmus Thiele (79) y su primo Hellmuth Grollmus Scherer (85) -propietario- escucharon los primeros ruidos, pero no alcanzaron a incorporarse a la entrada de la casa cuando vieron que cerca de 20 personas, a bordo de autos y motos, entraron al predio, disparando hacia el molino. No había mucho que hacer: los delincuentes atacaron por todo el frente de la propiedad y la capacidad de reacción fue casi nula. Casi, porque ambos alcanzaron a tomar sus armas.
Según la declaración del abogado Christián Grollmus Fritz (55), hijo de Hellmuth Grollmus, a la policía y los fiscales que posteriormente llegaron al lugar, los asaltantes “vestían con mantas de color café, premunidos con armas de fuego tipo escopetas, armas de grueso calibre y armamento corto, ingresan violentamente por el portón principal, el que se encontraba asegurado, y sin motivo ni justificación alguna proceden a disparar con todo el armamento”. El abogado también estaba en la casa y logró auxiliar a su padre y su tío, aunque también resultó con una herida ocular producto de un perdigón.
Carlos Grollmus fue quien sacó la peor parte: los encapuchados lo tomaron del cuello y le dispararon en una de sus piernas. El diagnóstico que le entregaron en el hospital fue el de una fractura expuesta en la pierna izquierda, la que posteriormente fue amputada, según lo confirmó la misma familia.
El ataque se sostuvo por casi 30 minutos y la policía no encontró lienzos reivindicatorios en el lugar, pero de todas formas se dispusieron medidas de protección para el predio, dado que este terreno colinda con una comunidad radical del Biobío. Los daños fueron avaluados en más de $ 500 millones.
La gravedad de los hechos motivaron el traslado del subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, a la zona, quien anunció para Arauco el reforzamiento del estado de excepción. “Vamos a tomar nuevas medidas que permitan mejorar las condiciones de seguridad, pero sobre todo prevenir y responder de manera más rápida”, sostuvo la autoridad de Interior.
En la familia Grollmus están impactados y acongojados por lo ocurrido, más cuando aseguran que no existían amenazas previas contra ellos. Los Grollmus son conocidos en la zona, debido a que se trata de colonos alemanes, quienes construyeron el molino y, dicen sus cercanos, siempre aportaron al desarrollo de Contulmo.
Christian Grollmus Fritz, quien es juez y estaba en el lugar al momento del atentado, señaló en Radio Concierto que fue “un baleo directo, le dije a mi papá que se tirara al suelo. Tengo armas inscritas y alcancé a repeler algo”. “Vemos a mi tío que lo pusieron como escudo humano al frente, le balearon la pierna y lo tiraron al fuego del molino. Lo logramos rescatar de las llamas, le hicimos un torniquete”, agregó.
La adjudicación de Resistencia Lafkenche
Durante horas de la tarde de este martes, el grupo Resistencia Mapuche Lafkenche (RML) emitió un comunicado adjudicándose el ataque contra el molina Grollmus. Según señaló la agrupación, el ataque surge como una “acción de respaldo a los presos políticos mapuches que permanecen en huelga de hambre en Arauco y Concepción exigiendo sus derechos carcelarios”.
En el texto difundido en el medio Werken Noticias, pidieron además el traslado desde la cárcel de Arauco de Víctor Llanquileo, quien cumple una condena de 21 años de cárcel por un asalto con rehenes en 2018 y habría comenzado una huelga de carácter seca en la cárcel de Arauco, y de Yerko Maril y Esteban Carrera. Estos últimos estás en prisión preventiva por dos casos distintos de homicidio en la zona.
La RML es uno de los cuatro grupos armados que opera en la Macrozona Sur. Específicamente, esta actúa en la Región del Biobío y centra sus acciones en las zonas costeras, en comunas como Tirúa, Cañete, Nueva Imperial, Carahue y Contulmo, donde fue el último hecho adjudicado por esta agrupación. La primera de sus apariciones públicas fue el 13 de abril de 2020, cuando se adjudicó un ataque a Carabineros y civiles que viajaban en la Ruta P-72S en Tirúa.
El grupo también ha reivindicado ataques con explosivos, como la denotación de un auto para destruir el Puente Lleulleu el 2020. Ese mismo año, el 23 de junio, la agrupación también se atribuyó el haber derribado de la misma manera una antena telefónica en Quidico. A través de un comunicado, en esa ocasión señalaron que “con esto damos un paso firme hacia la unidad de la Resistencia Mapuche en la zona Lafkenche”.
Uno de sus últimos ataques conocidos fue en abril de este año, cuando se adjudicaron el ataque incendiario que destruyó 15 viviendas en las orillas del lago Lanalhue, donde además robaron vehículos y bloquearon la ruta. Ese hecho también ocurrió en Contulmo y tuvieron un modo de operar similar a lo ocurrido la tarde de este lunes, ya que también ingresaron realizando disparos e incendiando completamente el lugar.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.