Un fuerte espaldarazo a los planteles privados dio el ministro de Educación, Gerardo Varela, durante un discurso en la inauguración del año académico de la U. Finis Terrae. "Intentaremos como ministerio dar un trato igualitario, no discriminatorio, a todas las instituciones de educación superior en Chile", señaló durante su alocución.
En la actividad, Varela añadió que "más que preocuparnos de la naturaleza de las instituciones, debemos preocuparnos por aquellos estudiantes que libremente las escogen. Estudiantes que, además, reciben diversas ayudas estatales...".
Con esto, el secretario de Estado marca una fuerte diferencia con la administración anterior, que habló de "trato preferente" hacia las universidades estatales y que incluso logró la aprobación de una ley para ese tipo de instituciones, la que se encuentra actualmente en control obligatorio constitucional.
El ministro recordó que en 1980 "sólo el 10% de los egresados de educación media en esa época estudiaban en la universidad, por lo que el salto que se logró el año 1981 con la ley que permitió la creación de las universidades privadas es algo que los chilenos debemos apreciar, atesorar y cuidar". Y subrayó que "la variedad de oferta universitaria y proyecto educativo es algo que como gobierno apreciamos, queremos defender...".
El diputado Gonzalo Winter, integrante de la Comisión de Educación de la Cámara, manifestó que "no todas las universidades son iguales, porque tienen distintos fines, lo público está al servicio de la sociedad y las universidades, cuando están al servicio de una transnacional que lucra, tienen como motivación el aumento de la ganancia y no de la educación que se imparte".
Enfatizó que "me parecen gravísimas las declaraciones del ministro, decir que todas las instituciones son iguales, por ejemplo frente a las platas del Estado, es tremendamente grave".
Varela también manifestó que "la universidad es un proyecto educativo, es un valor que como sociedad y como gobierno debemos promover. Nos entrega la posibilidad de elegir, de crecer y de discutir con quien piensa distinto. Es por esta razón que no vengo a pedirle a esta institución (U. Finis Terrae) que se parezca más a una u otra, sino que profundice y amplíen lo que ya le han entregado a Chile".
El rector de la U. del Desarrollo, Federico Valdés, sostuvo que "estas declaraciones muestran una vuelta al enfoque correcto, porque lo que tiene que preocupar al Ministerio de Educación son los alumnos y no la naturaleza de las instituciones en que eligen formarse". Y añadió que "en años anteriores vimos un sesgo absurdo y sin explicación que no trajo nada bueno".
El vicepresidente del Consejo de Rectores (Cruch), Aldo Valle, planteó que "obviamente la política pública debe estar regida por un principio de no discriminación, lo que supone, a su vez, reconocer las diferencias que tienen las instituciones en sus regímenes jurídicos, estructura patrimonial y relación con los fines públicos".
Gratuidad y déficit
Otro aspecto que abordó el ministro Varela es el déficit generado por la gratuidad en las instituciones: "Sabemos que hoy la universidad (Finis Terrae) se ha visto perjudicada por el déficit que hasta ahora han generado algunas reformas. Pero agradecemos que siga siendo parte de este sistema. Y nos comprometemos a buscar los mecanismos que permitan que la gratuidad se implemente de la mejor manera posible, para que las instituciones no vean afectados sus proyectos institucionales en su sanidad financiera".