Por unanimidad, el Tribunal Oral de Viña del Mar declaró culpable de abuso sexual contra una menor de edad –en calidad de reiterados- a Leonardo León Solís, historiador y exdocente universitario, quien, según estimaron las magistrados, cometió los delitos contra su propia hija, en el periodo en el que esta tenía entre 5 y 16 años de edad.
A su vez, el exdirector del Departamento de Historia de la Universidad de Chile, fue absuelto –también de manera unánime- del delito de violación, el cual había acusado la parte querellante.
Según se estableció en el juicio, los delitos se habrían cometido en los domicilios que la víctima, de actuales 19 años, compartió con su madre –quien también será llevada a juicio en calidad de cómplice- en Quilpué y posteriormente en Santiago.
"En principio estamos conformes con la decisión. Son 10 años de presidio mayor en su grado mínimo lo que estamos pidiendo, cuando la pena es superior a 5 años y un día debería ser de cumplimiento efectivo. Si el tribunal acogiere la colaboración sustancial que solicita la defensa, podría haber una rebaja de pena y podría ser cumplida de manera sustitutiva, pero no estamos de acuerdo con ello, creemos que no es recurrente y que no hay requisitos, pero es una decisión del tribunal", dijo el fiscal Hernán Silva.
En cuanto a la absolución del delito de violación, el abogado querellante, Cedric Macfarlane, sostuvo que "quedamos disconformes, creemos que existen antecedentes como para determinar la existencia del delito de violación, pero por cierto es una materia que vamos a tener que estudiar y una vez que el fallo esté en integridad en nuestro poder, determinaremos si recurrimos o no ante la Corte de Apelaciones con un recurso de nulidad".
Al respecto, la abogada Jeannette Bruna de la ONG Abogadas ProChile -que ha tomado diversos casos de violencia cometidos contra menores y mujeres- opinó que "es terrible denunciar violaciones sufridas cuando niña y que los tribunales estimen que no hay prueba suficiente y reduzcan todo a abusos sexuales, es una doble vulneración que demuestra la urgencia de que salga la ley de imprescriptibilidad de las violaciones y abusos sexuales contra niños, niñas y adolescentes. El tribunal debe tener claro que en este juicio hay una niña de 6 años en cuerpo de 19 que exige justicia y sólo existirá si se aplican las máximas penas por los delitos sexuales a que su padre en complicidad con su madre la sometieron por años, única forma de cumplir la función ejemplificadora de las sanciones penales. Las estadísticas demuestran que cerca del 70% de los abusos sexuales a menores de edad ocurren en el seno del hogar, por lo cual cambiar esas cifras dependen en gran parte de que los jueces en este y otros casos apliquen la pena máxima asignada, para empezar a demostrar que la niñez está primero".
La sentencia será dada por el Tribunal Oral de Viña del Mar el próximo 11 de abril.