Los inmigrantes están teniendo cada vez mayor relevancia en Chile, y las elecciones no son la excepción. Solo en siete años casi se triplicaron los extranjeros que tienen derecho a votar, pasando de 267.116 en 2017 a 786.466 en 2024. Y aunque por ahora representan un 5,1% de todo el padrón electoral (15,4 millones) hay expertos que consideran que podrían marcar la diferencia en los resultados de los comicios del 26 y 27 de octubre para elegir a alcaldes, gobernadores, consejeros regionales y concejales, sobre todo en aquellas comunas de resultado estrecho. Y que mirando el futuro, incluso puedan marcar el destino de las próximas elecciones presidenciales.

Tal ha sido su incremento en el padrón nacional que solo este año son 110.438 los nuevos migrantes habilitados para sufragar; es decir, aquellos que lo harán por primera vez, mientras que en 2023 los nuevos extranjeros habilitados fueron 161.400. Más atrás, en 2022, la cifra alcanzó los 99.707.

“El padrón electoral extranjero ha venido aumentando desde la década pasada, pero es en 2020 cuando se produce un primer gran quiebre, al incorporar el primer flujo de personas extranjeras que ya cumplieron 5 años en Chile, que es uno de los requisitos para estar habilitado”, sostiene José Tomás Vicuña, socio de Nómade Consultora.

Santiago, 25 de octubre 2024 Preparativos para las proximas elecciones municipales 2024 en el centro cultural Estacion Mapocho en la comuna de Santiago. Jonnathan Oyarzun/Aton Chile

Rosalma González de Hernández (química farmacéutica, 65) forma parte de ese nuevo universo de votantes. Llegó en 2017 desde Venezuela junto a su esposo y tres hijos, con los que actualmente residen en Ñuñoa. Con ellos, dice, concurrirá a votar al Estadio Nacional mañana. “Me siento complacida por eso. Pienso que como residente de este país, que solidariamente nos ha acogido, debemos participar de la vida ciudadana”, sostiene a La Tercera. Sobre todo, agrega, por ser una oportunidad de expresarse en cuanto a la política. “Como demócratas que somos, les damos valor a las elecciones. Sobre todo con la historia que arrastramos desde nuestro país”, afirma.

La comunidad venezolana es una de las que mayor número de electores posee (174.851), después de Perú (191.383). A ambos los siguen Colombia (95.407), Haití (76.481), Bolivia (67.979), Argentina (32.951) y Ecuador (24.647).

En cuanto a su participación respecto al padrón electoral, el factor migrante se concentra mayormente en la Región Metropolitana, donde representa el 8,6% del peso eleccionario. Una situación similar se vive en Arica y Parinacota (8,8%), Antofagasta (13,4%) y Tarapacá (15%). Y al hacer un desglose solo en la capital, su peso se aprecia en los municipios de Independencia (33%), Santiago (32%) y Estación Central (21%).

24 OCTUBRE 2024 PERSONAL DE LA ARMADA Y FUNCIONARIOS DEL SERVEL, EN EL LICEO BICENTERARIO DE VALPARAISO, QUE FUNCIONA COMO LOCAL DE VOTACION PARA LAS ELECCIONES 2024. FOTO: DEDVI MISSENE

Pero ¿cuánto podrían marcar esos votos? “En 22 comunas del país los extranjeros representan más del 10% del padrón electoral. En Independencia y Santiago, una de cada tres personas habilitadas es migrante. Ya no deben ser vistas como personas llegando al país, sino como vecinos que tienen preocupaciones y demandas muy similares a la población chilena”, dice Vicuña.

Y la comunidad es variada. Para las presentes elecciones son 168 las nacionalidades que tendrán un espacio en las urnas.

Como Claudia Campillo (profesora universitaria, 55), para quien no es un evento cualquiera. Como mexicana arraigada en Chile desde 2018, los comicios son un hito que ha venido esperando.

“El votar es un ejercicio muy importante para mí. Sobre todo estas elecciones donde se votan alcaldías y los gobiernos regionales, que son la primera línea de atención a los ciudadanos”, expresa.

24 OCTUBRE 2024 PERSONAL DE LA ARMADA Y FUNCIONARIOS DEL SERVEL, EN EL LICEO BICENTERARIO DE VALPARAISO, QUE FUNCIONA COMO LOCAL DE VOTACION PARA LAS ELECCIONES 2024. FOTO: DEDVI MISSENE

Para ella el sufragio es más que una responsabilidad. “Creo que esta idea de la igualdad sustantiva entre todos los ciudadanos que habitamos en un territorio tiene que hacerse válida expresando un punto de vista”, agrega.

Yasna Contreras, académica de la Universidad de Chile e investigadora del COES, incluso ve la participación de la población extranjera en las elecciones como un avance en materia de derechos humanos. “Es significativo que la población migrante que ya está asentada acá se convertirá en un ciudadano chileno y ejerza una práctica política con un rol significativo a lo que uno esperaría de cualquier persona que se vuelva ciudadano de derecho independiente”, cierra.