La madrugada del 31 de diciembre se registró un incendio al interior de una vivienda en Colonia Lolenco, en Angol. Tras contener el fuego, los equipos de emergencia descubrieron en una de las habitaciones los cuerpos calcinados de dos personas: Silvia Aravena Escalona, de 71 años, y Francisco Castro Beltrán, de 78.
El matrimonio de adultos mayores que residía en el inmueble siniestrado presuntamente dormía cuando se inició el fuego en la vivienda del Huerto 1 de la Ruta R-330, a eso de las 4.30 horas del domingo. Sin embargo, las diligencias investigativas han llevado a pensar que los hechos no ocurrieron de esa forma y la Fiscalía de Alta Complejidad de La Araucanía indaga el caso como un homicidio.
Antecedentes aportados a la investigación que realizó Carabineros cuando concurrió al sitio del suceso, dan cuenta que familiares de las víctimas hicieron presente en su declaración que el matrimonio había recibido amenazas.
Por otro lado, el primer análisis a los cadáveres de las víctimas reveló lo que serían lesiones atribuibles al corte de un arma blanca.
La Fiscalía de Alta Complejidad de La Araucanía, que dirige el fiscal César Schibar, se encuentra indagando y solicitó la concurrencia de personal especializado de Carabineros. El persecutor sostuvo que el preinforme de la autopsia practicada a las víctimas plantea indicios del uso de un arma blanca “que habría provocado la muerte” del matrimonio.
”Confirmar que como fiscalía estamos investigando el delito de homicidio respecto de un matrimonio de la tercera edad ocurrido en el sector de Angol. En cuanto tuvimos conocimiento como fiscalía de estos hechos se constituyeron en el sitio del suceso dos fiscales para desarrollar las primeras diligencias. Diligencias que fueron encargadas a Carabineros, específicamente a la unidad OS9 y Labocar de la misma institución”, indicó el fiscal Schibar.
La indagación se encuentra en manos del fiscal jefe de Angol Cristian Gacitúa, persecutor que cuenta con una amplia experiencia en homicidios.