En medio de las volátiles sesiones que han vivido las bolsas a nivel global en las últimas semanas, la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) aseguró que monitoreará de cerca los movimientos que pudiesen amenazar la estabilidad financiera.
"Nos mantendremos alertas ante cualquier riesgo en desarrollo para la estabilidad financiera", aseguró Jerome Powell en sus primeros comentarios como presidente del banco central.
Las palabras de la autoridad, que se publicaron en el marco de su ceremonia de juramento, se producen luego de que los mayores índices bursátiles del mundo vivieran su peor semana en dos años y la volatilidad se disparara en medio de los temores de los inversionistas de un mayor ajuste de las tasas de interés dados los indicios de presiones inflacionarias más robustas.
En todo caso, Powell destacó que "el sistema financiero es incomparablemente más fuerte y seguro, con capital y liquidez mucho más altos, mejor manejo de riesgos y otras mejoras" respecto de lo exhibido antes, durante y después de la crisis financiera.
En esa línea, el banquero adelantó que preservarán "las ganancias esenciales en regulación financiera" de los últimos años y, al mismo tiempo, buscarán "garantizar que nuestras políticas sean lo más eficientes posibles".
Las apuestas del mercado
A pesar de la reciente agitación en los mercados, la Fed continuaría ajustando su política. "Estamos en el proceso de normalizar gradualmente, tanto la política de tasa de interés como nuestro balance, con una visión para extender la recuperación y sostener la búsqueda de nuestros objetivos" de pleno empleo y estabilidad de precios, manifestó Powell.
Si bien los economistas y los inversionistas tienen incorporado un incremento en los tipos en la reunión de marzo, la perspectiva hacia adelante difiere entre ambos grupos.
Según la última encuesta de Bloomberg realizada la semana pasada a 70 analistas, la mayoría (57,14%) estima que el organismo elevará los costos de financiamiento en tres ocasiones en 2018, en línea con la última proyección de los miembros de la Fed.
Un 30% de los expertos anticipa que la entidad deberá acelerar el ritmo a cuatro aumentos, frente a los tres que aplicó el año pasado, y un economista incluso pronostica seis movidas en este ejercicio.
Con todo, un 88,6% de los analistas espera al menos tres alzas, lo que contrasta con la visión de los agentes del mercado, que auguran poco más de dos subidas.
De acuerdo con Bloomberg, los traders dan una probabilidad de 96% de un ajuste en las tasas en marzo a un rango de 1,5% a 1,75%. Para la sesión de junio, calculan una posibilidad de 59,1% que los tipos escalen en 25 puntos base hasta un rango de entre 1,75% y 2%.
En tanto, las chances de un movimiento de la misma magnitud en los encuentros de septiembre y diciembre llegan a 29,9% y 15,5%, respectivamente.
Si bien las expectativas de los inversionistas todavía se ubican por debajo de lo previsto por la Fed a fines de 2017, estas se han ido corrigiendo al alza en los últimos meses. A mediados de diciembre, el mercado vaticinaba menos de dos incrementos en 2018.
Si las señales de mayor inflación se materializan, es probable que la visión de los traders siga convergiendo hacia lo presagiado por los economistas y por el banco central.