A pesar del duro informe de Morgan Stanley dado a conocer el lunes, que anticipó que los precios del litio caerán fuertemente -pues la demanda por la electromovilidad no sería suficiente para contrarrestar la nueva oferta que está entrando-, las empresas productoras del commodity hacen oídos sordos y al revés, han anunciado que apurarán sus inversiones para aprovechar el boom de demanda.
El miércoles, Albemarle indicó que buscará anticipar la entrada de sus proyectos al 2021, los que se concentran en Argentina y Estados Unidos. Y ayer fue el turno de SQM, que en el reporte de sus resultados 2017 comentó que si actualmente su capacidad de producción en el salar de Atacama es de 63 mil toneladas por año, buscarán llegar a las 100 mil toneladas al 2019.
Pero la decisión no resultó gratuita para SQM. Ayer, las acciones de la minera no metálica tuvieron otra negativa jornada en la Bolsa de Comercio de Santiago, pese a las buenas utilidades que informó la compañía, y que alcanzaron los US$ 428,4 millones, un incremento de 51,9% respecto al 2016.
Así, el papel de SQM perdió ayer otro 6,24%, por lo que su valor ya se cotiza bajo los $ 30 mil, específicamente en $ 28.262. Con este movimiento, el papel acumula una baja de 17,8%, por lo que se encamina a terminar su peor semana desde agosto de 2013, días en que la acción de la empresa se derrumbó 22% como consecuencia del fin del llamado cartel del Potasio lo que derivó en importantes ajustes de las proyecciones de precios para el commodity en ese momento.
La decisión
Al igual que su rival estadounidense, que también opera en el salar de Atacama, la empresa chilena cree que la demanda mundial de litio aumentará, a su juicio, a un ritmo de 60 mil toneladas anuales en los próximos cinco años, por lo que para acompañar ese dinamismo es necesario apurar los proyectos.
Considerando lo anterior, el gerente general de la empresa, Patricio de Solminihac, anunció que para ello invertirán US$ 170 millones. Además, comunicó que en forma consolidada, incluyendo los otros negocios de la empresa, invertirá este año US$ 517 millones en sus proyectos en Chile y el exterior.
"Una posible expansión futura dependerá de las condiciones del mercado y nuestro objetivo es mantener alrededor del 25% del mercado en los próximos años", dijo.
Confianza en los precios
En una especie de respuesta al informe de Morgan Stanley, la empresa planteó que los precios del litio se mantendrán altos al menos en el corto plazo, añadiendo que han subido 20% en el último tiempo.
"Creemos, sinceramente, en el mercado del litio, ya que el crecimiento de su demanda, impulsado principalmente por el desarrollo de los vehículos eléctricos (VE), debiese seguir siendo muy fuerte durante los próximos años. El mercado necesitará que entren en producción más proyectos eficientes, para mantener el equilibrio del mercado y apoyar el desarrollo de los vehículos eléctricos y la industria de baterías", sostuvo el ejecutivo.
Impacto en la acción
En el mercado no causó mucha extrañeza que la caída de la acción, que pierde cerca de 22% de valor en lo que va del año. Más allá de los temores en el precio del litio, el hecho que solo en 2017 el papel tuviera un retorno de 97% hace pensar que bastaba una noticia no tan positiva para que las tomas de utilidades marcaran el rendimiento de SQM en la bolsa.
Para el gerente de renta variable de Tanner, Francisco Soto, el papel sigue cayendo por la narrativa que se ha construido a que habrá un exceso de producción de litio que no podrá ser absorbido por una demanda, que algunos estiman, crecerá bastante más lento que lo que están indicando las empresas del sector.
"Va a ser clave ir viendo cómo se va produciendo esta supuesta "inundación" de suministro en los próximos años y también el "lento" crecimiento de la demanda. Lamentablemente, ambos factores van a tardar tiempo en ser probados equivocados", dijo.
Como consecuencia del movimiento, una vez más el Ipsa fue el gran perjudicado, al caer 1,34% a 5.227,92 puntos.
William Adams, jefe de investigación de Metal Bulletin Group: "Estaremos en déficit por más tiempo"
¿Cuál es la perspectiva para el mercado del litio en los próximos años?
Hay nueva oferta entrando en funcionamiento, pero es necesaria. Muchos de los pronósticos miran la capacidad de producción, pero los productores, especialmente aquellos que están aumentando la nueva capacidad, tendrán problemas para producir tanto como muchos esperan. Al mismo tiempo, la demanda está creciendo y sólo estamos al inicio del auge que tiene muchas décadas por delante. El foco está en los autos eléctricos, pero el almacenamiento de red también tiene un enorme potencial.
¿Cómo podría impactar al mercado el acuerdo de SQM con Corfo?
El acuerdo por supuesto que le da a la compañía el potencial de elevar la expansión y con el tiempo lo hará, pero SQM tiene otros proyectos que está desarrollando fuera de Chile , por lo que podría no estar en ningún apuro para acelerar las expansiones en casa. Se anticipa que el alza en la producción de estas empresas suceda progresivamente, pero a un ritmo más lento de lo que muchos esperan.
¿Cuál es su visión respecto de la oferta de litio?
Es interesante que el mercado espere un superávit en el corto plazo, pues el shock de demanda se produjo en 2015, cuando China dijo inicialmente que quería producir 5 millones de autos eléctricos hacia 2020 (cifra que más tarde fue revisada a 2 millones). Desarrollar un proyecto nuevo toma 10 años, por lo que el mercado se está adelantando al esperar un superávit. Estaremos en déficit por más tiempo y luego en un mercado equilibrado.