Es como para combatir el insomnio. Algo así es contar los ceros, los miles, los millones y los miles de millones que ha invertido Carlos Heller para convertirse, a través de Inversiones Alpes, en el controlador de Universidad de Chile. El hombre, que sabe del negocio ganadero, seguramente, no ha hecho el ejercicio de usar la cifra para conciliar el sueño, reemplazando ovejas por pesos. Pero podría. Porque, en total, desde que inició su compra de acciones, llegar a eso le ha costado 16.171.280.026 pesos. O, en dólares, 25.816.220, al cambio de ayer.

Hace dos semanas, el empresario anunció una Oferta Pública para Adquisición de Acciones de Azul Azul. Busca hacerse de 3.757.904 valores, equivalentes al 10,29 por ciento del total de la Sociedad Anónima Deportiva que maneja a la U. En rigor, lo que comprará, esta vez a razón de 1.100 pesos cada una, es -en principio- lo que resta de la participación de José Yuraszeck en AA. Con ello, Heller sumará el 50,19 por ciento de papeles, convirtiéndose en el controlador de la sociedad que, el martes, transó a la baja un 7,69 por ciento, siendo la mayor caída del día.

Así, cumplirá un sueño, iniciado de niño, cuando trató de ser jugador. Antes de la quiebra del club, quiso ser dirigente. Ahora, por fin, será el accionista mayoritario.

Han pasado dos semanas desde que se anunció la OPA, y han transcurrido 2.781 días desde que el empresario compró el primer paquete accionario de AA. Desde esa primera, ha habido 30 operaciones más, a las que se sumará la de marzo, cuando se concrete la transacción definitiva en favor de Heller.

Las primeras acciones le costaron apenas 350 pesos cada una, el 3 de julio de 2007.

Luego de siete años, siete meses y nueve días, en 13 jornada que, en rigor, fueron siete períodos de compra, el hombre de negocios está próximo a cerrar el que más le seduce. Hasta hoy, puso 12.037.585.626 pesos. De ellos, ya empleó más de la mitad, en noviembre de 2013, en hacerse de un paquete accionario de Yuraszeck. Ahora, Heller, el controlador de la U, cumple su sueño. Y puede dormir tranquilo.