34.000 mujeres fueron asesinadas los últimos 25 años en México, según un estudio de organizaciones no gubernamentales dado a conocer en momentos que se celebra el día Internacional de la Mujer.
"Definitivamente no estamos cumpliendo la tarea como individuos, como sociedad y no estamos cumpliendo la tarea como instituciones públicas", declaró Ana Guezmes, representante en México de la agencia de la Organización de las Naciones Unidas que atiende el tema de las mujeres al comentar el estudio elaborado por el Instituto Nacional de las Mujeres y la Organización Nacional de Mujeres.
En México, al menos siete de cada diez mujeres reportan alguna forma de violencia a lo largo en sus vidas, según el informe.
El feminicidio "es la punta del iceberg más dolorosa, más indignante, de toda una cadena de actos de violencia y de impunidad", declaró Guezmes ante la prensa local durante la presentación del libro "Cómo medir la violencia contra las mujeres en México?", realizada en el ministerio de Gobernación (Interior).
Recordó el caso de Inés Fernández Ortega, indígena tlapaneca de la provincia de Guerrero, sobre el Pacífico sur mexicano, que fue violada por soldados diez años atrás y por lo que el Estado le ofreció disculpas públicas el martes.
Gezmes dijo que este 8 de marzo, la conmemoración del Día Internacional de la Mujer fue dedicado al empoderamiento de las mujeres rurales o indígenas, como principal contribución al desarrollo, la lucha contra el hambre y la pobreza.
México deberá presentar este año su informe relacionado con las políticas de igualdad; la ONU evalúa para determinar cuánto se ha avanzado y cuáles son los desafíos pendientes para México, así como de la forma en que este país está cumpliendo con sus obligaciones para combatir toda la forma de discriminación y violencia contra las mujeres.
Por ello, añadió Gezmes, la ONU impulsa un sistema para combatir la violencia contra las mujeres y las niñas, campaña que insta a poner en marcha acciones y marcos normativos para atacar este flagelo.
"La violencia contra las mujeres y las niñas persiste porque se permite; no es inevitable y nos convoca a la convicción de que puede ser eliminada. Tenemos impulso, apoyo político mundial para promover y hacer efectiva la igualdad de género", dijo.