Hoy se cerró uno de los capítulos finales de la crisis de la ex isapre Masvida, arrastrada desde mediados de 2016. Ello luego que el 98,4% de los acreedores presentes, que representan el 72,36% del pasivo con derecho a voto, votaran a favor del plan de reorganización judicial en que trabajaron el interventor de la ex isapre, Robert Rivas, y los abogados María José Contador y Luis Felipe Castañeda, del Estudio Nelson Contador & Cía.
Según asistentes a la junta, los votos en contra estuvieron principalmente desde los bancos, que suman acreencias totales por unos $ 15 mil millones, y que tras frenar la realización de la misma cita el 10 de octubre, continuaron sin llegar a acuerdo con los prestadores respecto de cómo se dividirán los $ 27 mil millones que deberá aportar Nexus. Las entidades financieras buscaban una forma de compensación debido a que -de acuerdo al plan-, el 100% de la venta de inmuebles iría a los prestadores.
Los votos en contra, según las fuentes, provinieron de Bci, Santander, Itaú-Corpbanca y Consorcio, además de Bci Factoring. Mientras, Scotiabank no asistió a la junta y BancoEstado votó a favor.
La decisión de la banca también les liberaría de la cláusula contenida en el acuerdo por el cual los acreedores renunciarían a ejercer acciones legales en contra del interventor, sus asesores y otras autoridades. También votaron en contra Colmena Golden Cros, Universidad de Los Andes y Novovision, entre otros.
Tensa negociación
La jornada fue no sólo extensa sino que estuvo marcada por la tensión. Desde la noche del martes, los ejecutivos y abogados de la isapre estuvieron negociando con los acreedores que hasta última hora no garantizaban dar su venia al plan. De hecho, la junta estuvo por un momento suspendida y durante la jornada de hoy la isapre estuvo tres veces a punto de ir a quiebra, dada la falta de los votos necesarios para aprobar la junta, lo que era requisito ineludible para que Nexus aporte los recursos acordados en abril de este año, a cambio de la cartera de afiliados, los que debería trasferir en un plazo de 60 días desde que el acuerdo esté notariado.
Los $ 27 mil millones se desglosan en $ 20 mil millones que corresponden a cuentas por cobrar con empresas relacionadas a Isapre Masvida; otros $ 5.000 millones a cuentas por cobrar de deuda previsional, de los que la Isapre Nueva Masvida (que controla Nexus) ya ha recaudado $ 4.000 millones; y $ 2.000 millones por los sistemas de información, muebles, marcas entre otros. Nexus declaró que cumplirá el compromiso pero también exigirá a todas sus contrapartes, "el cumplimiento irrestricto" de sus obligaciones por contratos, especialmente "el reconocimiento de las deudas de EMV y empresas relacionadas con Isapre Masvida, que a la fecha aún no han sido reconocidas y que según las auditorias encargadas por ambas partes ascienden a un monto aproximado de $ 78 mil millones, y que deben ser suscritos por Empresas Masvida o el Administrador Provisional Robert Rivas".