Ya van al menos 113 personas fallecidas tras el sismo que afectó el lunes a Christchurch, al sur de Nueva Zelandia, según informó el superintendente policial Dave Cliff.
Autoridades locales, estiman que el número de personas desaparecidas llega a 228.
La policía dijo que posiblemente algunos de los desaparecidos fallecieron, pero no se sabrá hasta que se realice una mayor verificación.
"Este desastre nos ha dejado realmente muy tocados", dijo el primer ministro del país, John Key, mediante una transmisión televisiva. "Tememos que la cifra final de muertos podría ser mucho mayor que la que esperábamos", agregó.
La cantidad de cuerpos quemados y sin huellas dactilares ha demorado la identificación de las víctimas.
En tanto, las autoridades han señalado que la única forma de encontrar a más personas con vida, sería por un "milagro". Desde ayer que no se encuentra a nadie con vida bajo lso escombros y, según trascendidos, habrían entre 50 y 100 personas bajo las edificaciones caídas.
En el tema económico, datos de la consultora J.P. Morgan indican que el terremoto costará a Nueva Zelandia y a las aseguradoras, hasta 12 mil millones de dólares, entre indemnización y gastos de construcción.