Con la última víctima mortal confirmada ayer, el número de personas fallecidas infectadas por influenza humana en Uruguay ascendió a 20, según informaron las autoridades sanitarias del país.

La víctima mortal, un guardia de seguridad de 29 años, estaba internado desde hace 12 días en el sanatorio del Círculo Católico de la capital y sufría de obesidad, según informaciones del portal digital uruguayo El País.

Hasta el lunes se habían registrado 163 casos confirmados de personas internadas con la nueva gripe, y otras 93 hospitalizadas con síntomas sospechosos. La ministra de Sanidad uruguaya, María Julia Muñoz, dijo al respecto que aunque ha disminuido el número de consultas puede volver a subir nuevamente, dependiendo de la evolución del virus.

La ministra uruguaya expresó que actualmente el 80% de los enfermos en el país tienen el virus AH1N1.

Por su parte, el presidente de la asociación Gordos Organizados de Uruguay, Luis Cherro, informó del temor de que el virus AH1N1 afecte principalmente a las personas obesas. "Es una enfermedad que se instaló muy bien en los obesos y esto se suma a las enfermedades que ya padecemos. No tenemos otra opción que asustarnos, preocuparnos y meternos en el tema", puntualizó.

En ese sentido, la agrupación reclamó una vez más para que la obesidad sea considerada una enfermedad crónica y se generen políticas de salud, ya que denuncian que las mutualistas no están preparadas para atenderlas. "Los obesos somos tremendamente vulnerables a las enfermedades. La gripe A nos golpeó mucho", explicó Cherro.

El presidente de la organización dijo que se solicitó una vez más al Presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, una reunión urgente para hablar sobre este tema al tiempo que están organizando encuentros con los candidatos a la presidencia para "conocer cuáles serán sus políticas si son electos", concluyó.