Al cumplirse un mes del trasplante cardiopulmonar al que fue sometido en el Hospital Italiano de Mendoza, Sandro demuestra buena evolución y festejó este mediodía almorzado lasagna en compañía de su esposa, Olga.

"La evolución es buena. Mira televisión, lo que lo mantiene bastante animado. Sólo está con un poco de dolor de garganta y una pequeña micosis que suele aparecer en los pacientes que están inmunosuprimidos y que es frecuente en los trasplantados. Pero es algo que se soluciona en forma bastante sencilla", dijo hoy el cardiocirujano Sergio Perrone.

El médico, que acompaña al ídolo desde los meses previos a su operación, comentó a la prensa que para que Sandro "pueda comer el asado que tanto quiere, tendrá que esperar un tiempo".

"Ya va a llegar el asadito del domingo... falta poco tiempo, mientras tanto está haciendo ejercicios con la kinesióloga", detalló Perrone.

El 20 de noviembre Sandro fue trasladado de urgencia al Hospital Italiano del departamento mendocino de Guaymallén, tras conseguir un donante de corazón y pulmones que recibió en forma satisfactoria luego de casi cinco horas de operación.

Tras esa intervención, el cantante, de 64 años, manifestó algunas complicaciones que paso a paso son mejoradas.