Que el último modelo del iPhone es más liviano que sus antecesores, es cierto. Que tiene una pantalla con mejor resolución, la facultad de sacar películas en HD, un poco más de memoria y un sistema que permite cambiar rápidamente de una aplicación a otra sin tener que cerrarla, también. Pero Xavier Bonnaire, experto en informática y docente de la Universidad Técnica Federico Santa María, explica que varias de estas funcionalidades "no son nada nuevo".

Uno de los puntos más engañosos, según Bonnaire, es que Apple argumenta que la pantalla tiene mucho más resolución: 300 puntos por pulgada. Pero ése sería sólo una estrategia de venta, porque el ojo humano no puede diferenciar entre una resolución de ese tipo y la anterior. No es una real ventaja tener esa resolución en una pantalla de ese porte. "Hay que ser realistas: un teléfono nunca ha sido un aparato pensado para sacar fotos y películas de alta calidad", asegura.

El profesor agrega que "el mercado hace que un teléfono celular deba realizar todo. A veces, lo más básico de un teléfono, realizar una llamada, no resulta tan fácil porque lo primero que tiene en el interfaz es el acceso a Twitter, Facebook, etc. Apple vende todo menos la capacidad de telefonía. Es impresionante cómo esta compañía ha mentalizado a los usuarios para que consideren relevantes aspectos que escapan a lo genérico y fundamental de este tipo de tecnología".

"Apple siempre ha sido muy fuerte en marketing, sobre todo en el plano de diseño y su organización previa antes de lanzar un producto. Crean una sensación de "indisponibilidad" del mismo, fomentando el deseo de consumo con propaganda y estrategias varias. Lo mismo hicieron con el iPad que, al igual que el iPhone 4G, tecnológicamente no tiene nada interesante", agrega.

Para Xavier Bonnaire, esa campaña de marketing provoca que el teléfono tenga una apariencia mucho mejor de lo que es realmente. Técnicamente, todas las propiedades que venden ya las tiene otros teléfonos sin que sean iPhone.

El académico dijo que la salida del nuevo iPhone no sólo corresponde a una necesidad de avance tecnológico de parte de Apple, sino que también a la fuerte competencia que existe  con Microsoft y con Google. De un lado, la versión de Windows 7 para celulares debería salir pronto, y por otro, cada día existen más celulares usando el sistema operativo Android de Google, que es un sistema open source gratuito.

"Muchas previsiones de mercado muestran que Android debería ser el sistema más usado por los fabricantes de celulares entre 2012 y 2013, y que el iPhone pasaría a la segunda posición del ranking. Eso representa una fuerte competencia para Apple y la salida del iPhone 4G corresponde a la necesidad de mantenerse como número uno del mercado", concluye.