Tres altos ejecutivos de la industria financiera analizarán las implicancias éticas que tiene el caso de los fondos Insignia y Global, de Aurus Capital, que desvinculó a su gerente de inversiones, Mauricio Peña, por supuestamente cometer defraudaciones por un monto, hasta ahora, cercano a los US$ 25 millones.
Será la "comisión de honor" de la Asociación Chilena de Administradoras de Fondos de Inversión (Acafi) la que analice este caso en particular y luego decida aplicar una sanción. Estas van desde la orden de suspender por el acto antiético; una amonestación que "puede recaer sobre empresas, aún cuando las transgresiones sean efectuadas por personas naturales"; o incluso la suspensión de la pertenencia del gremio, según indica el código de ética de Acafi.
Conocedores de esta comisión cuentan que ya fueron convocados los expertos y que fue el propio Antonio Cruz, presidente de Aurus, quien se acercó a la Acafi y dijo estar disponible para entregar información a la comisión de honor.
El proceso, aunque no tiene plazos, se espera que avance lo más rápido posible teniendo en consideración la colaboración que comprometió la firma.
El código
En un documento de 14 páginas se resume el código de ética de la Acafi que busca establecer "los principios y responsabilidades que se deberán observar para preservar elevados estándares de integridad personal y profesional que contribuyen a la reputación y a los negocios de los Asociados", y afirma que es "parte de la autorregulación que debe existir en la industria".
Como parte de las conductas mínimas que se establecen en el código, está el que los asociados "deberán entregar un servicio diligente a sus clientes, proporcionando de manera veraz, suficiente y oportuna toda aquella información que sea relevante para que el cliente pueda tomar la decisión de inversión".
Sobre las sanciones, dice que se aplicarán de acuerdo al "daño eventual o real producido, directo o indirecto, al resto de los Asociados y a la industria en su conjunto".