Las llamadas "cajas negras" de un avión son los dispositivos que graban las comunicaciones y parámetros de vuelo de una aeronave con el objetivo de que esos datos puedan servir para analizar las causas de un eventual accidente.
Comenzaron a utilizarse en 1958, son aparatos de unos 4,5 kilos y del tamaño de una caja de zapatos, de color rojo o naranja, con bandas reflectantes para facilitar su localización, aunque suelen volverse negras por las llamas cuando el aparato se incendia.
Las cajas negras se sitúan en la cola del aparato porque es el lugar que estadísticamente mejor resiste a un siniestro. Están preparadas para soportar desaceleraciones equivalentes a pasar de 500 kilómetros por hora a cero, en menos de cinco segundos. Y también para resistir una temperatura de 1.100 grados centígrados durante una hora o para aguantar un mes sumergidas a 6.000 metros de profundidad.
La recuperación de una de las cajas negras del avión A320, por parte de las autoridades francesas, es clave para entender lo que provocó el accidente del Airbus de la aerolínea alemana Germanwings. Este es el primer paso para entender porque el avión cayó desde una altura de 12,4 kilómetros hasta casi 2000 metros en apenas ocho minutos, sin que los pilotos dieran un llamado de emergencia para advertir lo que sucedía.
Las cajas negras que incorpora un avión son de dos tipos: CVR y FDR. La primera registra datos de audio en la cabina, como diálogos entre los pilotos y con los controladores aéreos, así como el sonido ambiente. Y la segunda (FDR) registra en código binario los parámetros fundamentales de la operación, su grabación se prolonga durante 25 horas.
Hasta ahora, los equipos de rescate han podido analizar solo la CVR, que contendría el registro de audio desde que el avión despegó a las 10:01 en Barcelona hasta que comenzó su caída 44 minutos después, perdiendo el contacto con el control aéreo, a las 10:53 horas. Estos últimos ocho minutos son los más importantes para entender el accidente.
Los investigadores que analizan los restos del avión encontraron la CVR "dañada", pero han podido extraer un "archivo de audio utilizable" de ella. Aunque, podrían tardar "varias semanas o meses" en sacar conclusiones fiables sobre la causa del accidente.
"Es poco probable que haya una gran degradación de la calidad" del audio pero "tenemos que afinar la comprensión" de lo que sucedió en la cabina y eso puede tardar "varias semanas o varios meses", declaró hoy en conferencia de prensa el director de la Oficina de Investigaciones y Análisis (BEA) francesa, Rémi Jouty.
El máximo responsable del BEA agregó que aún necesitan llegar a la comprensión del "sonido, los ruidos, las alarmas y la atribución de las voces de las personas" y evitó cualquier especulación sobre lo que se escucha en la grabación o si hay alguna pista sobre la causa del siniestro.
Con respecto a la caja negra FDR, el Presidente francés, François Hollande, anunció hoy que se ha encontrado la carcasa de esta caja negra, pero no su contenido, se sigue buscando.