El pasado 15 de marzo terminó la temporada de playas para las autoridades, en el periodo que comenzó el 15 de diciembre se registraron 299 emergencias, lo que significa un 26% menos en contraste con las 410 ocurridas en la temporada anterior.
La cantidad de víctimas fatales también presentó un descenso, con sólo 19 personas ahogadas, llegando la temporada pasada a las 23. Debido a la fuerte presencia fiscalizadora y de resguardo efectuado por la Armada de Chile, 252 bañistas fueron rescatados ilesos desde el agua, bajando la cifra en un 28,4% respecto al año anterior, donde se presentaron 352 rescates exitosos, lo que refleja una menor tasa de accidentes debido a las campañas de autocuidado.
El Director de Seguridad y Operaciones Marítimas de la Armada de Chile, Contraalmirante Iván Valenzuela, señaló que "hemos hecho un trabajo fuerte en los colegios y escuelas de la Región Metropolitana de Santiago, con un acuerdo que tenemos con el Ministerio de Educación, con lo que hemos podido llegar a la comunas más populares para transmitir el mensaje de educación en términos de cuáles son las medidas de seguridad y autoprotección".
Respecto a la temporada anterior de playas, se mantiene la tendencia que ubica a los turistas provenientes de la Región Metropolitana como los con mayores tasas de accidentes. Durante esta temporada estival, 92 bañistas residentes en la capital sufrieron emergencias marítimas, seguidos por los veraneantes de La Serena y Antofagasta, con 41 y 15 casos respectivamente.
En tanto, Coquimbo fue la región con una mayor tasa de accidentes, con 166 casos, seguido por Valparaíso con 59 y Valdivia (Los Ríos) con 11 emergencias.
Un dato que confirma el permanente llamado de la Armada a ingresar sólo a playas autorizadas, es que sólo 4 bañistas fallecieron en estos lugares, contrastando con los 15 ahogados en playas no autorizadas. El 82% de los accidentes se producen en playas no aptas.