La actividad económica de Brasil creció más de lo esperado en enero, con ventas minoristas sólidas que compensaron con creces buena parte de la abrupta desaceleración registrada el mes previo, informó este viernes el Banco Central.
El índice de actividad económica IBC-Br del Banco Central de Brasil subió un 1,26% en enero frente a diciembre, en términos ajustados por estacionalidad.
La mediana de las estimaciones en un sondeo de Reuters a 26 analistas apuntaba a un incremento de un 0,7% en el IBC-Br desde diciembre.
El resultado superó las expectativas y casi anuló el derrumbe de 1,4% de diciembre.
Sin embargo, el índice -un medición aproximada del Producto Interno Bruto (PIB), siguió apuntando a un crecimiento para Brasil inferior de al de sus pares. El IBC-Br subió un 0,93% desestacionalizado respecto al mismo mes del año previo.
Desde fines de 2011, la economía brasileña sufre un crecimiento débil y una elevada inflación, pese a los incontables intentos del Gobierno de Dilma Rousseff para impulsar la actividad con medidas de estímulo.
El año pasado, el crecimiento económico fue de apenas un 2,3% y se espera que se desacelere durante 2014, según estimaciones privadas.