Un índice clave sobre la actividad manufacturera de Estados Unidos se aceleró levemente en mayo, según un sondeo divulgado el lunes, aunque el ritmo aún era lento y sugiere que el sector podría ser un lastre para la economía estadounidense en el segundo trimestre.
La firma de servicios de información financiera Markit dijo que su índice final de Gerentes de Compra (PMI, por su sigla en inglés) para el sector manufacturero en mayo subió a 52,3 desde 52,1 en abril, que fue mejor que la lectura preliminar de 51,9. Una lectura sobre 50 indica expansión.
El crecimiento en la producción declinó por tercer mes consecutivo, y el subíndice bajó a 52,7 desde 53,7, mientras que el ritmo de contrataciones en el sector cayó a un mínimo nivel en seis meses.
"El sondeo muestra un panorama pesimista de las condiciones de negocios manufactureros en Estados Unidos. La producción, los libros de pedidos y el desempleo están creciendo modestamente, lo que sugiere que el sector está en riesgo de estancarse", afirmó Chris Williamson, economista jefe de Markit.
La medición de nuevos pedidos de parte de clientes internos subió a 53,3 desde 51,5, lo que ayudó al índice principal a mejorar levemente respecto al resultado de abril.
Eso también ayudó a compensar un declive en los pedidos del exterior, que cayeron por primera vez en tres meses. Williamson dijo que un crecimiento más lento en el sector fabril probablemente contribuya a una expansión económica más débil en el segundo trimestre.
La economía se expandió a un ritmo de un 2,4% entre enero y marzo, un salto importante en comparación al avance de un 0,4 por ciento en los últimos tres meses del 2012.
Sin embargo, los economistas sospechan que una desaceleración de las manufacturas y una caída en el gasto del gobierno podrían restarle impulso en el segundo trimestre, repitiendo un patrón visto en los últimos dos años.
El índice de gerentes de compras del Instituto de Gerencia y Abastecimiento para abril mostró que el crecimiento del sector se desaceleró.