El Indice Mensual de Actividad de la Construcción (Imacon), elaborado por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), retrocedió 4,1% anual en agosto, cifra que, pese a ser negativa, muestra una ligera moderación en las caídas consecutivas que ha experimentado el sector desde hace ya doce meses.
El gerente de Estudios del gremio, Javier Hurtado, señaló que "este resultado es coherente con el efecto de menores bases de comparación y con expectativas menos pesimistas por parte de los empresarios de la construcción, respecto de lo observado hasta agosto del año pasado".
Por su parte, Sergio Torretti, presidente de la CChC, sostuvo que "un año con cifras negativas en la construcción es un claro reflejo de que la pérdida de consensos respecto de las bases para seguir creciendo como país nos ha afectado profundamente. No solo a los constructores, sino a todos porque la construcción de menos proyectos de inversión es menos productividad, menos empleo, menos oportunidades y menos confianzas en el futuro. Por eso ahora se deben volver a construir grandes acuerdos en pro del desarrollo, donde la alianza público-privada es central".
La contratación de mano de obra registró en agosto una caída anual de 5,6%. El empleo dependiente retrocedió 6,9% anual (lo que implicó la pérdida de 32.000 plazas de trabajo en un año) y los ocupados por cuenta propia se contrajeron 4,2%, situación que no se observaba desde agosto de 2014 (lo que implica una disminución de 8.000 trabajadores independientes en el sector).
El índice de ventas de proveedores retrocedió 5,9% anual en agosto, manteniendo la tendencia a la baja de su crecimiento interanual observado en los últimos 12 meses. En tanto, el índice de despachos de materiales, que aproxima la demanda de materiales de obra gruesa, cayó 7,9% anual, consistente con una menor provisión de hormigón y cemento respecto de 2016.
La actividad de contratistas generales avanzó en agosto 0,3% anual, cifra inferior a la observada el mes anterior. Este resultado es coherente con el menor dinamismo en la actividad de obras civiles y montajes, ítem preponderante en la composición de este indicador, y la menor actividad de movimiento de tierras. En tanto, el descenso de este subcomponente fue mitigado por las mayores facturaciones vinculadas al desarrollo de obras para el comercio.
La aprobación de permisos de edificación aumentó en términos anuales, revirtiendo gradualmente la tendencia contractiva observada en los primeros meses del año. La superficie aprobada para edificación anotó así una variación anual de 21,5%. En esta ocasión, tanto los permisos con destino habitacional como los no habitacional evidenciaron un alza durante agosto.