La actividad del sector manufacturero en Estados Unidos se contrajo en julio, por décimo octavo mes consecutivo, pero a menor ritmo que en el mes anterior, según datos que difundió hoy el Instituto de Gestión de Suministros (ISM).

El índice de actividad manufacturera que elabora esa entidad se situó en 48,9 puntos el mes pasado, comparado con los 44,8 puntos de junio y los 46,5 puntos que esperaban los economistas.

El índice de julio es el más elevado que se registra desde agosto del pasado año, cuando se situó en 49,3 puntos.

Un índice superior a 50 puntos refleja un avance generalizado de la actividad en el sector y por debajo de ese nivel, una contracción.

El subíndice relativo a nuevos pedidos a las empresas subió a 55,3 puntos en el mes pasado, desde los 49,2 puntos de junio, y el de producción ascendió a 57,9 puntos, desde los 52,5 puntos anteriores.

El avance en esos ámbitos alienta expectativas de futuro crecimiento en el sector, resaltó el experto del ISM, Norbert Ore, en un comunicado de prensa, al tiempo que señaló que los datos sobre empleo y existencias también mostraron una menor contracción que en meses anteriores.

El subíndice relativo al empleo en el sector se situó en 45,6 puntos en julio, frente a los 40,7 de junio, y el de existencias almacenadas subió a 33,5 puntos, desde los 30,8 puntos anteriores.

En cuanto a los precios que pagaron las empresas por materias primas y servicios para desarrollar su actividad, el índice que mide esa variable se situó en 55 puntos el mes pasado, frente a los 50 puntos de junio.

Ore manifestó que, a la vista del comportamiento del sector en julio, "sería difícil convencer a muchos fabricantes de que estamos a punto de una recuperación, pero los datos sugieren que si continúan esas tendencias veremos un crecimiento en el tercer trimestre".