El actor Philip Seymour Hoffman, reconocido por su brillante actuación de Truman Capote en la película biográfica del periodista, se sometió a un nuevo tratamiento antidrogas.

La estrella de Hollywood permaneció cerca de dos semanas internado tras una recaída ocasionada por la ingesta de pastillas recetadas por un médico, las que desencadenaron su adicción hasta terminar en la heroína, según indicó el artista al portal TMZ.

El actor tuvo problemas con las drogas hace más de dos décadas, dejando sus adicciones por 23 años. En el mismo portal, Hoffman dijo que su abuso de heroína sólo le duró una semana y que tras percatarse de su recaída, buscó ayuda para iniciar un tratamiento de desintoxicación, donde permaneció por 10 días.

Tras su salida, el ganador del Oscar, el Globo de Oro y un Bafta como mejor actor por Capote (2005) retomó inmediatamente sus proyectos, que incluyen una cinta rodada en Europa.