Si un argentino de visita en el país sufre un accidente grave, ¿dónde debe atenderse? Y si un chileno requiere una atención de urgencia al otro lado de la cordillera, ¿a quién debe recurrir? Además, si la prestación médica ya ha sido entregada ¿a quién corresponde pagarla?
Esas son algunas interrogantes que busca zanjar el protocolo que acordaron las autoridades de salud de Coquimbo, Valparaíso y Mendoza, para facilitar el acceso a la salud de las personas que visiten ambos países.
"Hay un acuerdo binacional que garantiza la atención de chilenos y argentinos en caso de emergencia, pero faltaba establecer un procedimiento para que los hospitales supieran cómo actuar. La idea es que no existan dudas de chilenos y argentinos frente a este tema para que, en caso de necesitarlo, reciban la atención con la prontitud debida", dice Carlos Alejandro Aznar, subsecretario de Planificación y Control del Ministerio de Salud de la Provincia de Mendoza.
El procedimiento aplicable en el Chile es la extensión de la ley de urgencia vigente y que impide exigir cheques en garantía o documentos financieros a pacientes graves.
"Este es un protocolo de asistencia bilateral que establece que en el caso de un ciudadano argentino que se presente en un servicio de urgencia, no deberá hacer ningún depósito ni están obligados a ningún gasto previo, y lo mismo ocurre con los chilenos que van a Argentina", añade el ministro de Salud, Jaime Mañalich.
Una vez que la atención sea realizada y el visitante haya sido estabilizado, y salido del riesgo vital, se notificará a los respectivos consulados para que se evalúe la posibilidad de traslado o permanencia del paciente.
"Esta atención en Chile no necesariamente será gratuita, porque en caso de que el paciente tenga algún seguro privado o de viaje, puede existir una cobranza. Pero de lo que se trata es que esa primera atención no esté sujeta a ningún pago", añade Mañalich.
ATENCION A CHILENOS
Aznar explicó que las dificultades para los mendocinos en Chile radican en la diferencia de los sistemas de salud. "Si un chileno se atiende en Mendoza, por las características de nuestro sistema se le da la atención sin cobrarle, pero el sistema de chileno tiene un modelo de pago", añade.
Para emergencias, se coordinó que los chilenos en el país vecino llamen al 911 y los mendocinos visitantes lo harán al 131. Además, se acordó crear un registro de prestaciones médicas que se otorgue a los visitantes mientras están en tránsito.
El seremi de Salud de Valparaíso, Jaime Jamett, explicó que la idea es tener los procedimientos bien delimitados antes de que comience la temporada estival, fecha en que se espera que cerca de 80 mil argentinos crucen la frontera".
"Desde el 1 de enero se fortalecerá este plan de contingencia. Hay que informar de la red de asistencia que tienen a disposición los turistas, porque hay desconocimiento en ambas partes. Y a través de las emergencias en las fronteras habrá servicio de divulgación, entregando teléfonos de emergencia", precisó Jamett.