A las 9.00 de ayer, los pescadores de Horcón salieron en sus botes para iniciar las labores de limpieza de las trazas de petróleo esparcidas en la bahía. Tras el derrame de 22 mil litros de crudo, ocurrido en Quintero el 24 de septiembre, lo que más preocupa a los artesanales es la preservación de su área de manejo, de donde extraen lapas y erizos.

El grupo de 120 artesanales, a los que se suman otros 120 pescadores de caleta Ventanas, está actuando en forma independiente, desmarcado de otros 350 pescadores de dos caletas de Quintero y otras cuatro de Maitencillo, Loncura, Papagayo y Ventanas, que esta semana firmaron un acuerdo con Enap, por $ 1,5 millones, a cambio de la limpieza de las áreas afectadas.

Justiniano Lagos, presidente de la caleta de Horcón, dijo que los artesanales de su zona no están en ese acuerdo. "No se puede llamar compensación a los $ 40 mil que Enap está pagando por la limpieza. Aquí no hay ninguna negociación por indemnizaciones, ya que el daño va a durar al menos 12 años", afirmó el dirigente, añadiendo que "estamos pidiendo que el Ministerio de Salud se haga cargo y se hagan estudios a nuestros productos para saber si están aptos para el consumo".

Después de 10 días de limpieza, se siguen encontrando evidencias del derrame. Ayer, en Horcón, se hallaron restos de petróleo en cordeles, lo que fue tomado como evidencia por los pescadores. En tanto, desde ocurrido el derrame, las trazas de crudo se han desplazado casi 20 km al norte de la localidad.

José Carvajal, presidente del sindicato de pescadores de caleta Ventanas, añadió que desde el vertimiento  no han podido extraer huiros, pero tampoco suscribieron el convenio de limpieza. "No  vamos a transar con la empresa", enfatizó.

NUEVOS FOCOS

Roberto Monardes, vocero de Caletas Unidas de Quintero, que están junto a Enap trabajando en el área afectada, dijo que este fin de semana las labores de limpieza se  focalizaron en puntilla San Fuente, sector rocoso de difícil acceso y la playa de Cachagua de Zapallar, donde el viernes se halló gránulos de crudo al sur del balneario.

"Nos dijeron de Enap que los operativos iban a durar entre 15 y 20 días, mientras se realicen estudios encargados a Sernapesca para saber el estado de nuestras áreas de manejo", precisó. Monardes agregó que este año el fenómeno de marejadas será más complejo, "las corrientes en esta zona son muy agresivas. Si el petróleo sigue hacia el norte podría llegar a Pichicuy y Los Molles".

El gobernador marítimo de Valparaíso, Cristián Gálvez, informó que tras el derrame han efectuado monitoreos ambientales, a través de extracción de muestras de diferentes puntas de la bahía. Precisó además que la mancha de petróleo en la superficie del mar "está prácticamente retirada".