Con diferentes trajes y vestimentas de superhéroes, fue despedido Jacob Hall, un niño de tan sólo seis años, que murió baleado por un adolescente en su escuela primaria en Carolina del Sur.
Jacob era fanático de los superhéroes por lo que su familia pidió a quienes asistan al velorio, a que vistan con temas alusivos a estos personajes de ficción, como recuerdo de algo que Jacob disfrutaba. "Queremos rendir homenaje a Jacob, festejarlo como a él le hubiese gustado", dijo su tía abuela Rebecca Hunnicutt al diario Anderson Independent Mail.
El menor falleció luego de que una bala lo alcanzara en la arteria principal del muslo. Fue transportado a un hospital en Greenville donde murió el sábado.
El funeral se realizará en esta aldea rural cerca del límite estatal de Georgia.