¿Decidieron apelar al fallo del juzgado civil que ordenó liquidar los bienes del recinto educacional?
Si bien la liquidación se enmarca dentro de la ley, significa un cambio en el escenario de la administración provisional, que se ha llevado a cabo desde junio de 2015. Desde el martes al mediodía, cuando se decretó la liquidación, he sostenido diversas reuniones con abogados y el Ministerio de Educación para definir la estrategia jurídica a seguir, y luego, dentro de los recursos que me faculta la ley, informo a la comunidad que vamos a apelar a la resolución, así como otra acción que permita el cumplimiento de la Ley 20.800 (de administrador provisional y de cierre).
¿Van a presentar un recurso de no innovar para paralizar la liquidación?
Es parte de una estrategia que se presentará en su oportunidad, pero no queremos dar detalle para que tenga mayor eficacia.
¿Qué implica apelar a esa resolución?
Aquí hay dos leyes, la de administración provisional y la de liquidación. Ley 20.800 establece precisamente en caso de un liquidador cuáles son las discusiones de administración provisional o de cierre. Como esto es primera vez que se presenta, hay distintos aspectos interpretativos y eso deberá dirimir el tribunal competente. En el fondo, determinar cómo deben convivir y armonizarse, cuáles son los espacios y atribuciones de cada uno. El liquidador tiene otros propósitos, saldar deudas, mientras que la ley de administrador busca que los alumnos continúen sus estudios.
¿Buscan evitar el cierre de la institución?
Con esta acción judicial buscamos apelar a esta decisión del Cuarto Juzgado de Santiago.
¿Pero buscan frenar el cierre?
Claro, lo que busca es mantener el estándar de la administración provisional y que los alumnos sigan con sus estudios.
¿Se puede evitar un cierre si ni siquiera se cumple la meta de la matrícula?
Efectivamente, no se ha llegado a la cifra de 570 matriculados. Es importante señalar que a todos los alumnos nuevos se les informó acerca de la situación de la universidad. Con una declaración informada se les dijo que al 10 de marzo, si no se llegaba a cierta cantidad de estudiantes que dieran viabilidad, ellos se podían retractar sin ninguna consecuencia.
Si a los alumnos se les notifica el 10 de marzo si hay continuidad del plantel, ¿cuándo exactamente se decide si cierra o no?
Como informó anteriormente la ministra, marzo es el mes de evaluación, junto con la comunidad, para ver el destino de la universidad.
¿A esa fecha no debería estar tomada la decisión?
Lo que pasa es que el escenario actual cambió. Lo que estamos haciendo es acudir a los recursos que la ley nos faculta.
¿Y cuántos alumnos se matricularon?
Fue una cifra inferior a lo que se estableció como meta.
¿Se va a reunir con el liquidador desginado, que ya está actuando?
Evidentemente va a ocurrir una reunión. Estamos a la espera de que se materialice.
