Aerolíneas Argentinas ha sufrido pérdidas mensuales de hasta US$63,1 millones, admitió el presidente de la compañía, Mariano Recalde, quien indicó que se está renegociando el acuerdo de compra de aviones a la brasileña Embraer.

En una entrevista publicada hoy en la web del diario Crítica de Buenos Aires, embistió contra el grupo español Marsans, el antiguo dueño de la aerolínea de bandera, que fue intervenida en julio de 2008 y este año entró en un proceso de expropiación para su nacionalización.

"El objetivo de Aerolíneas Argentinas no es ganar plata", sino conectar al país, aseguró luego de reconocer que Aerolíneas Argentinas y su subsidiaria Austral sufren "una situación particular, con crisis internacional y la gripe A, que generó una reducción abrupta en las ventas".

"Pero si se compara con el rojo de Marsans, es un tercio del que dejaron. A partir de la gestión estatal el déficit se fue reduciendo mes a mes de US$60,1 millones a US$20 millones", aseguró.

Recalde reconoció sin embargo que en el primer semestre del año la compañía ha sufrido unas pérdidas de 160 millones de pesos (US$42,1 millones) en promedio mensual.

Sostuvo que "siguen en pie" y "van a avanzar en las próximas semanas" unas negociaciones con Embraer al calor de un acuerdo para la compra de una veintena de aviones destinados a la flotilla de Austral, la subsidiaria de vuelos de cabotaje.

En el acuerdo firmado este año con la firma aeronáutica brasileña "había unas fechas límites para cerrar el contrato pero se está renegociando", comentó sin más.

El presidente de Aerolíneas Argentinas se desmarcó de gestiones que se llevan a cabo con Marsans para evitar que el grupo español presente una demanda por una millonaria indemnización ante el tribunal de arbitrajes del Banco Mundial en momentos en que no ha concluido el proceso de expropiación de la compañía.

Dijo que ese asunto está en manos del ministro argentino de Planificación, Julio De Vido.

Sin embargo, Recalde apuntó que trabaja pensando en demandar a Marsans por el presunto vaciamiento de la compañía, aunque matizó que por ahora no tiene "nada en concreto" para dar ese paso.

"Marsans vino con un plan deliberado de destruir" Aerolíneas Argentinas "y transformar a Austral es una empresa de chárter" para los vuelos de compañías del grupo turístico español, aseguró.

El dirigente de la compañía aérea es un abogado vinculado a la Confederación General del Trabajo, el mayor sindicato argentino, cuyo líder, Hugo Moyano, es uno de los principales aliados del Gobierno.