Los insurgentes prorrusos anunciaron el martes que comenzaron a retirar su artillería de los sectores del  este de Ucrania donde el ejército ucraniano hizo lo propio, pero todavía se registran combates, sobre todo en el aeropuerto de Donetsk.

Tres días después de la firma en Minsk de un acuerdo que refuerza las primeras medidas de alto el fuego decididas el 5 de septiembre, se creaban  progresivamente las condiciones para una tregua.

"Hemos retirado nuestra artillería en las zonas donde las fuerzas ucranianas regulares hicieron lo mismo. En los lugares donde la artillería  ucraniana no fue retirada, nosotros tampoco retiramos la nuestra", declaró a la agencia de noticias rusa Interfax Alexander Zajarchenko, el "primer ministro"  de la autoproclamada República Popular de Donetsk.

Al retirar gradualmente sus cañones, los beligerantes permiten la  instauración de una zona desmilitarizada de 30 km a lo largo de la línea de  frente congelada el 19 de septiembre.

La creacion de esta zona es parte fundamental del acuerdo de paz entre Kiev y los separatistas de las regiones de lengua rusa de Donetsk y Luhansk. 

Por otro lado, un habitante de Donetsk murió en los combates durante las  últimas 24 horas, convirtiéndose en la primera víctima civil desde la firma el  sábado pasado del memorándum de Minsk.

INCENDIO EN EL AEROPUERTO DE DONETSK 

A lo largo de más de 230 km de línea de frente entre Luhansk al norte y  Novoazovsk al sur, hay varias zonas problemáticas.

Sobre todo en el estratégico aeropuerto de Donetsk, una ciudad que tenía un  millón de habitantes antes de que comenzaran los combates, en primavera (boreal).  

En mayo, los rebeldes atacaron al aeropuerto, provocando una enérgica  intervención del ejército que logró un control parcial del mismo. Desde  entonces, los combates son casi cotidianos.

Tanto Kiev como los insurgentes reiteraron que no tenían intenciones de  abandonar sus posiciones. "El aeropuerto es nuestro territorio", declaró a la  AFP uno de los dirigentes de la autoproclamada república popular de Donetsk,  Andrei Purguin.

El aeropuerto era presa de las llamas el martes por la mañana debido a los  tiros de armas pesadas, según los periodistas de la AFP en la zona.

Por su parte, el ejército ucraniano anunció el lunes el comienzo de la  aplicación de las disposiciones del plan de paz.

"Nos disponemos a mover 15 km hacia atrás el armamento pesado" de la línea  de frente, declaró el portavoz del ejército, Andri Lysenko, congratulándose de  que no se registraron incursiones de militares rusos en la frontera ni disparos  "procedentes del territorio ruso".

Gracias a esta tregua, caravanas de ayuda rusa y ucraniana pudieron llegar  durante el fin de semana a Donetsk y Luhansk. Y por la primera vez desde el 26  de julio, un tren procedente de Kiev llegó a Luhansk el lunes. 

El conflicto costó la vida a casi 2.900 personas y condujo a un  enfrentamiento sin precedentes desde el fin de la Guerra Fría entre rusos y  occidentales.

Esos acontecimientos tuvieron lugar después de meses de agitación en  Ucrania, de un movimiento de protesta proeuropeo en Kiev que desembocó en la  caída del presidente Viktor Yanukovich, de la anexión de la península ucraniana  de Crimea por Rusia y del surgimiento del separatismo prorruso en el este.

Durante las próximas negociaciones, el tema fundamental será el estatuto de  las regiones separatistas. 

Por ahora, los rebeldes ignoran las propuestas de Kiev de otorgar una mayor  autonomía durante tres años a las zonas bajo su control, organizar elecciones  locales el 7 de diciembre y otorgar una amnistía a los combatientes.

Kiev y los separatistas empiezan a establecer zona desmilitarizada