La cannabis puede ayudar a combatir la osteoporosis porque tiene un efecto de protección frente al debilitamiento de los huesos en las personas mayores, según un estudio de la Universidad de Edimburgo (Escocia) conocido hoy.
La investigación se realizó con ratones y constató que el cannabis activa una molécula clave que ayuda a evitar el desarrollo de la osteoporosis, una dolencia que afecta a un 30 por ciento de las mujeres y a un 12 por ciento de los hombres mayores.
Otro elemento positivo que descubrieron los científicos de la Universidad de Edimburgo con respecto a determinados componentes del cannabis es que previene la acumulación de grasa en los huesos.
Stuart Ralston, profesor de reumatología de esta universidad, dijo que el hallazgo "es un paso adelante apasionante", pero advirtió de que se trata de unos resultados iniciales y de que son necesarios nuevos análisis clínicos en laboratorio para determinar cómo difieren los efectos del cannabis en función de la edad.
"Tenemos previsto realizar pronto nuevas pruebas y esperamos que los resultados ayudarán a desarrollar nuevos tratamientos valiosos en la lucha contra la osteoporosis", manifestó Ralston.
El investigador aclaró que fumar cannabis es "malo a cualquier edad" para los huesos y para la salud en general, e indicó que en el caso de las personas mayores "los efectos psicotrópicos" de la droga "pueden incrementar el riesgo de caídas en las personas mayores, y por lo tanto de rotura de huesos".
"La fórmula ideal para avanzar en este terreno sería desarrollar un medicamento parecido al cannabis que no tuviera un efecto directo sobre el cerebro, sino sobre la periferia", declaró Ralston.