Disidentes informaron que en el marco de una visita no anunciada previamente se reunieron en la isla con la subsecretaria asistente de Estados Unidos, Bisa Williams, quien se interesó por saber sobre el apoyo popular a los opositores en Cuba.
Unos 15 activistas fueron convocados el lunes 21 de septiembre a la sede de la Oficina de Intereses de Estados Unidos en esta capital para un "almuerzo de trabajo" con Williams, indicaron varios de los opositores.
"El asunto era escuchar nuestros criterios... una reunión informal, no era nada protocolar", comentó la disidente y ex presa política Martha Beatriz Roque. Además de ella estuvo el líder de la Comisión Cubana de Derechos Humanos, Elizardo Sánchez y los ex presos Vladimiro Roca; René Gómez Manzano y Felix Bonne, entre otros.
Williams se tomó casi dos horas para escucharlos a todos en temas como las relaciones Cuba-Estados Unidos y las actividades realizadas por los disidentes.
"Ella preguntó sobre el apoyo popular a la oposición. Yo le expliqué que eso era algo difícil, porque la oposición llevaba cárcel" en Cuba, manifestó Roque. "Claro, le expliqué que no todos pensábamos igual", agregó.
Para Sánchez, el encuentro entre Williams y los disidentes fue "algo coherente con la política actual de Washington de mantener contactos con el gobierno (cubano) sin renunciar a ver a la sociedad civil".
La funcionaria encabezó las conversaciones con el gobierno cubano del 17 de septiembre en torno a la posibilidad de reiniciar el servicio de correo directo entre los países, suspendido desde 1963.
Ese diálogo se anunció, pero ninguno de los dos países había revelado que Williams permaneció en La Habana cinco días más.
Durante esas jornadas extras se reunió con el vicecanciller cubano Dagoberto Rodríguez, visitó un área afectada por huracanes en la provincia occidental de Pinar del Río y recorrió una instalación agrícola gubernamental, dijeron funcionarios del Departamento de Estado.
La vocera de la Oficina de Intereses de Estados Unidos en La Habana, Gloria Berbena, solo dijo que Williams había sostenido reuniones "con una variedad de representantes de la sociedad civil cubana".
Una semana después, el martes y de manera inusual, ningún disidente fue visto en una recepción organizada por la representación. En cambio por primera vez asistieron centenares de artistas como los músicos Carlos Varela y Juan Formell o los pintores Fabelo y Choco.
Varios disidentes consultados indicaron que no habían sido invitados, pese a que hasta el momento una representación de ellos siempre iba a las recepciones diplomáticas estadounidenses, cualquiera fuera su índole.
"Ellos (los estadounidenses) están tratando de ser cuidadosos", comentó Sánchez para quien es obvio que hay una "dinámica entre los dos gobiernos".
Berbena no quiso ofrecer la lista de invitados, aunque aseguró que se trató de una actividad artística y cultural para presentar a nuevos funcionarios con estos artistas.