Miembros del Movimiento Social de los Trabajadores (MST) y del Proyecto Sur, agrupaciones de izquierda en Argentina, marcharon hoy a la embajada británica en Buenos Aires, donde exigieron la ruptura de relaciones diplomáticas con el Reino Unido a raíz de su negativa a negociar la soberanía de las islas Malvinas.

Rodeados por un pelotón de agentes policiales, el grupo liderado por el cineasta Fernando "Pino" Solanas, se manifestaron frente la sede diplomática y quemaron tres banderas británicas.

"Estamos exigiendo al gobierno argentino que rompa relaciones con Reino Unido, porque no puede ser que refuercen con tropas y venga el príncipe (Guillermo) a hacer maniobras", declaró Vilma Ripoll, líder del MST.

La dirigente repudió las declaraciones del martes del primer ministro británico David Cameron en la que acusó a Argentina de "colonialismo". "Ellos que son los principales colonialistas, ya que en el siglo XXI de 16 colonias en el mundo, 11 son británicas", aseguró.

Vilma Ripoll confirmó la intención de realizar más acciones de protesta para la llegada del p´rincipe a las islas en febrero -en las que está destinado como piloto de helicóptero de búsqueda y rescate durante seis semanas- y para la cual esperan aglutinar "una representación más amplia".

La polémica entre los gobiernos británico y argentino se acrecentó en diciembre cuando los países del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) decidieron no permitir entrar a sus puertos a barcos con bandera de las Falklands (denominación británica de las Malvinas).

El ministro de Interior argentino, Florencio Randazzo, aseguró hoy que Argentina va a "seguir insistiendo para que Reino Unido se siente a dialogar". "El reclamo de la soberanía para nosotros ha sido una política de Estado irrenunciable", indicó Randazzo en medios oficiales del gobierno.

En un conflicto que se inició con la ocupación británica de las islas en 1833, la ONU dictaminó en 1965 que el de las Malvinas es un caso de colonialismo ante el cual deben negociar los dos países implicado, conversaciones que permanecen interrumpidas desde la guerra librada por argentinos y británicos en 1982.