La compañía Air France va a sustituir en unos días las sondas encargadas de medir la velocidad en sus aviones de los modelos A330 y A340, con lo que acelera el calendario para ese reemplazo, anunció hoy el Sindicato Nacional de Pilotos de Línea (SNPL).
El sindicato, mayoritario en la compañía, no quiso hacer comentarios al respecto y se limitó a remitir al comunicado que sobre esta cuestión había hecho el pasado sábado.
En dicho comunicado, Air France explicaba que había "acelerado" su programa de sustitución de las sondas de velocidad, lanzado el pasado 27 de abril, después de haber constatado desde mayo de 2008 que algunas de las originales habían causado "incidentes de pérdidas de informaciones".
La aerolínea francesa también insistía en que ese programa se había puesto en marcha sin esperar el fin de una experimentación propuesta por el fabricante de los A330 y A340, el grupo europeo Airbus, para verificar que una nueva sonda podría aportar una mejora significativa en caso de congelación en altitud.
Airbus había emitido en septiembre de 2007 una recomendación para que se sustituyeran las sondas.
Ayer Alter, un sindicato minoritario de pilotos (representa al 5% de los de Air France) había instado a las tripulaciones de la compañía que se negaran a volar con los aparatos en los que todavía no se hubieran cambiado los instrumentos de medida de la velocidad.
Según una nota interna de la compañía de noviembre pasado, cuyo contenido se ha filtrado en las últimas horas, Air France tenía constancia de "un número significativo de incidentes" con esos instrumentos de medida.
El BEA, organismo francés encargado de investigar el siniestro del A330 de Air France que el pasado día 1 se cayó en el Atlántico con 228 personas a bordo, ha dado cuenta de que hubo "una incoherencia de velocidades medidas" por dichas sondas, aunque ha insistido en que por el momento no se ha podido establecer un vínculo entre eso y las averías detectadas en diversos sistemas del avión.
Por otro lado, el ministro francés de Ecología, JeanLouis Borloo, afirmó hoy que la identificación de los cadáveres que se vayan recuperando en el mar se va a hacer "con total transparencia" y que esa labor "se hace en coordinación con las autoridades brasileñas".
Los brasileños habían conseguido rescatar hasta ayer 24 cuerpos que van a ser trasladados hasta el depósito de cadáveres de Recife, donde se llevará a cabo la identificación, con la colaboración de gendarmes franceses que han tomado muestras genéticas de familiares de algunas de las víctimas.