Al estadio, con la boca cerrada
La Selección recibe a Uruguay ya castigado por el comportamiento de sus hinchas, lo que le impedirá actuar en el Estadio Nacional frente a Venezuela. La controvertida reglamentación de la FIFA obliga a los fanáticos casi al silencio.
Chile tiene el público de peor comportamiento en las Eliminatorias. La hinchada de la Roja ha recibido ocho sanciones por conductas que están penadas por la FIFA. De hecho, el duelo frente a Uruguay, en el Nacional antecede a uno que deberá jugarse fuera del reducto de Ñuñoa por la sanción que aplicó el organismo, el 4 de octubre, ante la reincidencia de los fanáticos en comportamientos sancionables: el que se disputará frente a Venezuela. "Dado que Chile reincidió en su período de prueba fijado en mayo de 2016, su selección no podrá disputar en el Estadio Nacional Julio Martínez Prádanos de Santiago otro partido más que, en esta ocasión, será el clasificatorio para el Mundial contra Venezuela del 28 de marzo de 2017", consigna la sentencia.
Hoy, ante la Celeste, los aficionados estarán nuevamente bajo observación. Y deberán, virtualmente, ir con la boca cerrada. O, al menos, privarse de cualquier manifestación que pueda ser considerada discriminatoria en función del artículo 67 del Código Disciplinario de la FIFA, que se ha transformado en el peor enemigo de los intereses de la federación chilena. La última sanción se produjo por los cánticos homofóbicos en el duelo ante Perú: multa de 15 mil francos suizos (diez millones de pesos, aproximadamente) y amonestación verbal.
¿Qué se puede decir en el estadio? Ahí nace la duda. En la ANFP, insisten en quejarse por la ambigüedad de las disposiciones reglamentarias. De hecho, el sustento jurídico de las sanciones estaría en el numeral 3 del mentado artículo 67 del Código: "Se considera conducta impropia, particularmente, los actos de violencia contra personas o cosas, el empleo de objetos inflamables, el lanzamiento de objetos, el despliegue de pancartas con textos ofensivos al honor o contenido político, los gritos injuriosos y la invasión del terreno de juego".
En Quilín consideran que el margen que ofrece la expresión "gritos injuriosos" es demasiado amplio. "Cuesta explicarlo y centrarlo. Hay un vacío de redacción. Es muy amplia la explicación y la interpretación de la regla. Entonces, se hace difícil codificarla. Habría que hacer un manual, porque en cada país difiere la forma de expresarse. Los informantes son personas que, muchas veces, carecen del conocimiento de la idiosincrasia de los hinchas. Influye, también, el criterio de cada persona al informar. Qué informar y qué no", sostienen. FIFA recibe el apoyo de una ONG para monitorear el comportamiento de los aficionados en el interior de los estadios. Y en la entidad que rige el fútbol ejemplifican: "Hasta la palabra 'huevón', que es tan chilena, la han incluido en los informes".
De cualquier forma, siguen incentivando a los hinchas para que tengan una buena conducta. A la campaña que se desarrolló en la fecha anterior bajo el hashtag #LaPelotaEsTuya, que contó con la participación de figuras como Gary Medel, Mauricio Pinilla y Francisco Silva, ahora sumaron la web serie #SomosChile, que destaca la multiculturalidad de las selecciones nacionales y en la que intervinieron el seleccionado sub 20 Nozomi Kimura, la seleccionada adulta Yessenia Huenteo, el seleccionado sub 17 Pedro Campos y la sub 20 Romina Parraguez. "Viene a mostrar que cada vez que se discrimina, el ataque también es recibido por nuestros seleccionados nacionales", sostiene el comunicado del lanzamiento de la producción.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.