El grupo catarí de televisión satelital Al-Jazeera acusó a las autoridades egipcias de crear interferencias para impedir la difusión de sus programas por su cobertura crítica de la represión policial contra los islamistas en Egipto.
El martes, la justicia egipcia había ordenado el cierre de Al-Jazeera Mubasher Misr, filial egipcia del grupo, junto a otros tres canales locales.
"Expertos independientes" contratados por Al-Jazeera localizaron el origen de las interferencias y lo situaron en el este y oeste de la capital, donde hay instalaciones militares egipcias.
Al-Jazeera indicó haber tenido que cambiar de frecuencia en varias oportunidades, para permitir a sus espectadores captar sus canales de información y de deportes.
Las autoridades egipcias acusan a Al-Jazeera de cubrir de manera parcial los sangrientos acontecimientos que siguieron a la destitución del presidente islamista Mohamed Morsi el 3 de julio tras las manifestaciones masivas que reclamaron su salida del poder.