Al menos doce iraquíes murieron hoy, en su mayoría miembros de las fuerzas de seguridad, y otros 20 resultaron heridos en varios ataques en diferentes ciudades del país, informó a Efe una fuente policial.
Cuatro civiles murieron y otros ocho resultaron heridos por bombardeos de artillería del ejército iraquí sobre el norte, sur y centro de Faluya, ciudad situada a 50 kilómetros al oeste de Bagdad.
Dos policías murieron en un ataque perpetrado por hombres armados a un puesto de control en la ciudad de Sharqat, a 280 kilómetros al norte de la capital iraquí.
Un coche bomba que estaba aparcado frente a la casa de un comisario de policía en el barrio moderno de la ciudad de Beiyi, al norte de la capital, hizo explosión, lo que dejó cinco civiles heridos.
La misma fuente explicó que dos policías murieron y otros cuatro resultaron heridos tras la explosión de una bomba lanzada contra una patrulla en la ciudad de Muqdadiya, a 120 kilómetros al noreste de Bagdad.
Dos hombres armados asesinaron con un arma con silenciador al brigada Faiz Abdul Rahman, un ex oficial del ejército iraquí, en el distrito de Karrada, en el centro de Bagdad.
Un soldado murió y otros tres civiles resultaron heridos tras la explosión de una bomba al final de un funeral en el este de la ciudad de Mosul, centro de la provincia del mismo nombre.
Otro militar fue asesinado por unos desconocidos que le atacaron con armas ligeras en la zona de Al Faisaliah, en el éste de Mosul, al norte de Bagdad, la misma zona donde un policía murió por un ataque con ametralladoras.
Irak sufre un repunte de la violencia confesional y de los atentados terroristas, que causaron en 2013 la muerte de 8.868 personas, de las que 7.818 eran civiles, según las cifras difundidas por la ONU.