La ola de frío siberiano que azota Europa Central y los Balcanes desde hace once días deja hasta ahora 124 muertos en la región, donde debido al deshielo se registran inundaciones en el sur de Bulgaria.

El país más afectado es Rumania, con 38 fallecidos, dos en las últimas 24 horas, según informó hoy el Ministerio de Sanidad.

Las autoridades meteorológicas mantienen el estado de alerta por frío hasta el domingo y las fuertes nevadas siguen causando problemas de circulación en todo el país.

En Hungría en las últimas 24 horas han muerto dos personas por hipotermia y otra por la inhalación de monóxido de carbono debido al mal funcionamiento de la calefacción, con lo que las cifras totales por el temporal ascienden a 17, informó la agencia estatal MTI.

El Servicio de Meteorología declaró el estado de alerta amarilla en 12 provincias y naranja en otras dos, de las 19 en total, por la tormenta de nieve debido a los vientos de hasta 70 kilómetros por hora. Según los pronósticos, la situación meteorológica no cambiará en Hungría en los próximos siete días.

REPUBLICA CHECA

En República Checa las víctimas del frío se elevan a 19, en su mayoría personas sin hogar, y con récords de mínimas en muchas estaciones meteorológicas del país, informaron las autoridades checas.

En la estación meteorológica de Kvilda-Perla, en las montañas meridionales de Sumava, se registraron el domingo por la noche 39,4 grados bajo cero, las más baja de todo el país, aunque en los próximos días pueda batirse el récord de 42,2 grados bajo cero, que data de 1929.

SERBIA

En Serbia, donde se han producido diez víctimas debido a las bajas temperaturas, se han formado gruesas capas de hielo en varios ríos y las autoridades preparan planes para usar explosivos y rompehielos para prevenir el desbordamiento de las aguas.

Es difícil la situación en el río Ibar, a la altura de la ciudad de Kraljevo, en el sur, y en el Danubio, donde hay peligro de que se forme un estrato de 100 kilómetros de largo en el tramo hacia la central hidroeléctrica de Djerdap, en el este, fronterizo con Rumanía.

Unos 70.000 ciudadanos de aldeas montañosas están aisladas y hasta ahora se han evacuado a 177 personas que necesitaban asistencia médica.

En Bosnia-Herzegovina, el número de víctimas del frío ha subido hoy a once, después de que los cuerpos de dos ancianas fueron encontrados la aldea de Goranci, cerca de Mostar, en el sur, bloqueado por las nevadas, según informaron los equipos de rescate.

También es crítica la situación en el este bosnio, en las aldeas montañosas de los entornos de Srebrenica, sobre todo en Luka, donde las fuertes nevadas tienen bloqueado desde hace unas semanas el acceso a unos 200 ciudadanos.

En Bulgaria el temporal de frío dejó seis muertos y las inundaciones posteriores por el deshielo han causado otras doce víctimas.

Los mayores daños se han producido en la pequeña localidad de Biser, cerca de la sureña ciudad de Harmanli y de la frontera con Grecia, y donde la rotura de un dique por el deshielo anegó la localidad.

Una ola de casi tres metros inundó el lunes a primeras horas de la mañana ese pueblo de 800 habitantes, donde varios equipos de rescate de Protección Civil y el Ejército han trabajado durante toda la noche evacuando y buscando gente entre los escombros de varias casas destruidas.

En la vecina Grecia tres ancianos han muerto desde el domingo a causa de las inundaciones, la nieve y el fuerte temporal que azota estos días Grecia, especialmente el norte del país.

Las autoridades griegas han desalojado pueblos en el norte de Grecia por temor a que se desborden las presas de la vecina Bulgaria.

En otros países de la región se han producido también víctimas mortales por el temporal de nieve, así, en Austria se han contabilizado cinco fallecimientos, y un muerto, respectivamente, en Montenegro, Macedonia y Eslovaquia.