Al menos 17 personas murieron en las inundaciones que desde ayer afectan Sicilia, y en particular la provincia de Messina, en el norte de la isla, según informó el jefe del servicio italiano de Protección Civil, Guido Bertolaso.

Bertolaso añadió que existen varias decenas de heridos, y definió la situación como "muy grave y muy crítica".

La mayoría de las víctimas estaban atrapadas en el barrizal y basuras arrastradas por la corriente del agua y algunas de ellas fueron encontradas en sus coches.

Según los medios italianos, varios edificios se derrumbaron a causa de un desprendimiento de tierras en la ciudad de Messina, donde varias decenas de personas están atrapadas sobre el techo de sus casas.

Tanto la circulación ferroviaria como por carretera para entrar y salir de la ciudad de Messina están interrumpidas.

También se han registrado inundaciones, aunque de menor importancia, en la capital de la región, Palermo.

El Consejo de Ministros italiano ha decretado además el Estado de Emergencia ante la gravedad de las inundaciones, informó hoy el Gobierno italiano a través de su página web.