Al menos 60 muertos y otras 150 personas resultaron heridas en un atentado suicida en un centro de reclutamiento de la Policía de Tikrit, a 170 kilómetros al norte de Bagdad, informaron fuentes policiales de esa localidad.

Según las primeras informaciones, el terrorista detonó la carga de explosivos que llevaba adosada al cuerpo dentro del edificio donde se congregaban numerosos voluntarios para ingresar en el cuerpo de seguridad.

Las víctimas se encontraban realizando los trámites para conseguir su ingreso en la Policía.

Tras el ataque, las fuerzas de seguridad iraquíes se dirigieron al lugar de la explosión, en la plaza de Al Ehtifalat, en el norte de Tikrit, para facilitar el traslado de las víctimas a los hospitales de la ciudad natal del ex presidente iraquí Sadam Husein.

Las calles que conducen al centro de reclutamiento han sido cerradas, indicaron las fuentes, que añadieron que hasta el momento ningún grupo ha asumido la autoría del atentado.

El ataque ocurre un día después de que el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, asegurara que su país ya tiene experiencia en la lucha antiterrorista y ha ofrecido ayuda a países donde Al Qaeda planea lanzar ataques.