Al menos cuatros personas murieron y 291 siguen desaparecidas tras el naufragio de un ferry frente a la costa sur de Corea del Sur con 459 personas a bordo, en su mayoría estudiantes de secundaria que se iban de vacaciones.
El gobierno surcoreano confirmó la muerte de cuatro personas, entre ellas un estudiante y una mujer de la tripulación, pero el balance de víctimas podría ser muy superior.
"Me temo que hay pocas posibilidades de encontrar en vida a los que todavía están atrapados dentro", dijo Cho Yang-Bok, un responsable de las tareas de rescate a la cadena YTN.
A medida que avanzaba la noche, los buceadores, entre ellos un equipo de las fuerzas especiales surcoreanas, seguían inspeccionando el barco de varias cubiertas con la ayuda de grandes focos para encontrar supervivientes.
En un primer momento las autoridades anunciaron que 368 personas habían sido rescatadas pero más tarde sólo pudieron confirmar el rescate de 164, explicó Lee Gyeong-Og, viceministro de Seguridad y Administraciones Públicas en una rueda de prensa en Seúl.
Las autoridades temen que cientos de personas estén atrapadas en el ferry, que volcó y se hundió cerca de la isla de Byungpoong en apenas dos horas después del envío de la primera señal de socorro a las 09H00 de la mañana local (00H00 GMT).
La televisión mostró imágenes aéreas de los pasajeros con chalecos salvavidas en botes hinchables huyendo del ferry. Algunos bajaban deslizándose por el casco del barco totalmente inclinado mientras otros eran rescatados por pequeños botes de pescadores.
El ferry se dirigía a la isla de Jeju, un complejo turístico muy popular en el país. Entre los pasajeros había más de 300 estudiantes y 14 profesores de una escuela de enseñanza secundaria de Ansan, una ciudad en el sur de Seúl, que iban de vacaciones.
Al menos 78 de los rescatados eran estudiantes.
"Siento un profundo dolor de ver como unos estudiantes que iban de viaje se enfrentan a este trágico accidente. Quiero que pongan toda su energía en su misión", dijo la presidenta Park Geun-Hye durante una visita al centro de coordinación de emergencias en Seúl.
Los padres de los alumnos se reunieron en la escuela secundaria de Ansan a la espera de noticias, e intentaban comunicarse con sus hijos.
Muchas personas fueron rescatadas por barcos de pesca y buques mercantes que estaban en la zona antes de que llegaran los guardacostas con apoyo de helicópteros.
También participaron en el rescate buceadores y fuerzas especiales de la marina surcoreana, explicó el viceministro. "Hay mucho barro en el agua y la visibilidad es muy escasa", explicó.
El ferry, una embarcación de 6.825 toneladas, zarpó del puerto de Incheon el martes por la noche pero empezó a tener problemas tras recorrer 13 millas (20 kilómetros), frente a la isla de Byungpoong.
'Un ruido muy fuerte'
Aunque todavía se desconocen las causas del accidente, algunos supervivientes explicaron que el ferry se detuvo de pronto, como si hubiera encallado, a pesar de que las condiciones meteorológicas eran favorables.
"La tripulación nos pidió que no nos moviéramos pero luego el barco de inclinó de pronto y era muy difícil salir", dijo un testimonio a la cadena YTN.
"Hubo un ruido muy muy fuerte y luego el barco empezó a inclinarse hacia un lado", relató otro superviviente, Kim Song-Muk. "La gente intentaban subir a las cubiertas superiores pero era muy difícil con el barco inclinado", dijo a YTN.
El barco se inclinó primero más de 45 grados, luego volcó casi por completo y sólo una pequeña parte quedó fuera del agua, según las imágenes difundidas en televisión.
"El barco estaba hundido casi por completo cuando llegué. Tiene que haber mucha gente atrapada", dijo a la AFP un responsable local que no quiso identificarse y que llegó a la zona una hora después del naufragio.
"Oí un gran golpe y el barco empezó de pronto a inclinarse. Algunos de mis amigos cayeron al suelo y empezaron a sangrar. Nosotros saltamos al agua y nos rescataron", explicó un estudiante a la cadena YTN.
El tráfico marítimo entre Corea del Sur y sus múltiples islas es muy intenso y los accidentes son excepcionales, aunque en octubre de 1993 cerca de 300 personas murieron en el naufragio de un ferry.