Al menos dos personas murieron y quince resultaron heridas hoy en Perú como consecuencia del enfrentamiento entre manifestantes y la policía tras el intento de toma del aeropuerto de Juliaca, en la región sureña de Puno, fronteriza con Bolivia.
Los enfrentamientos se iniciaron cuando cerca de mil manifestantes, que participan en un paro de 48 horas que se inició ayer en la ciudad de Juliaca contra la contaminación de un río a consecuencia de la actividad minera, trataron de ingresar a la pista de aterrizaje del aeropuerto.
Según el coordinador de la Defensoría del Pueblo en Juliaca, Jacinto Ticona, la policía respondió a la acción de los manifestantes y lograron evitar que el aeropuerto fuera tomado. Sin embargo, varios vuelos fueron afectados, entre ellos uno procedente de Lima que tuvo que devolverse, y el recinto permanece cerrado mientras los manifestantes se han replegado hasta una zona cercana.
La policía respondió al intento de toma del aeropuerto con gases lacrimógenos y disparos al aire de perdigones y balas, lo que habría provocado los heridos y fallecidos.
Desde ayer la ciudad de Juliaca, importante punto comercial del sur de Perú, permanece totalmente parada a consecuencia de la huelga de 48 horas convocada por un grupo de pobladores de la región de Azángaro. Estos manifestantes, que según la Defensoría del Pueblo serían unas 5.000 personas en Juliaca, protestan ante la inacción del gobierno en la descontaminación del río Ramis a consecuencia de la actividad minera en la zona.
Del mismo modo, los manifestantes, que pertenecen a la etnia quechua, apoyan las protestas que desde hace más de un mes otros ciudadanos de la región de Puno mantienen contra la actividad minera en la zona. Precisamente, un líder aymara, se encuentra en Lima manteniendo negociaciones con el Ejecutivo para lograr un acuerdo que solucione el conflicto en la zona.